El pasado 1 de febrero, el presidente Laurentino Cortizo sancionó la Ley de Medicamentos, una medida destinada a asegurar la disponibilidad y el abastecimiento oportuno y seguro de medicamentos de calidad para la población atendida en las instituciones de salud pública, incluida la Caja de Seguro Social (CSS). Esta ley promete cambiar el panorama de la escasez de medicamentos a uno de disponibilidad garantizada.
Para evaluar el impacto de esta legislación, TVN Noticias visitó varias policlínicas en el país y consultó a los pacientes sobre su experiencia. Los resultados fueron mixtos: mientras algunos pacientes informaron que el servicio no ha mejorado y que aún tienen dificultades para obtener los medicamentos necesarios, otros destacaron mejoras.
Algunos pacientes señalaron que los medicamentos se agotan rápidamente y que han tenido que visitar las policlínicas varias veces en un mes para obtener lo que necesitan. También se mencionó la escasez de insumos básicos como inyecciones y medicamentos para la presión. Otros expresaron dificultades para encontrar todos sus medicamentos en un solo lugar, lo que les lleva a acudir a múltiples policlínicas con la esperanza de obtenerlos.
La nueva ley surgió de la Mesa Técnica de Medicamentos, encabezada por el vicepresidente José Gabriel Carrizo, y es el resultado de consultas y consensos entre usuarios, pacientes, el sector privado y el Gobierno. Contempla la inclusión de una guía de farmacovigilancia, convirtiendo a Panamá en un país pionero en este aspecto.
Además, establece un Sistema Nacional de Precios de Referencia de Medicamentos para garantizar que las instituciones obtengan el mejor precio y calidad en la compra. Unifica la compra de medicamentos, reduciendo los tiempos para la recepción de propuestas y convocatorias, y establece el uso del sistema de Panamá Compra al 100%.
La norma también establece sanciones para empresas y funcionarios que incumplan con los procesos de compra, protegiendo así el presupuesto destinado a medicamentos.
Si bien esta ley promete mejoras significativas en el abastecimiento de medicamentos, es evidente que aún quedan desafíos por superar para garantizar un acceso efectivo y oportuno a los tratamientos necesarios para la población atendida por la CSS.