Los cheques se giraban, pero nadie sabe a quién se le entregaba el billete.
Pagan y nadie sabe a quién: escándalo de cheques fantasmas
Lo que era un secreto a voces, hoy está negro sobre blanco. La alcaldesa Irma Hernández no se quedó callada y le metió el diente a lo que, según ella, es un escándalo con nombre y apellido: Héctor Valdés Carrasquilla.
Acompañada por su abogado, Hernández se fue directo al Ministerio Público y presentó una denuncia penal que podría poner de cabeza la gestión pasada del Municipio de San Miguelito. ¿El motivo? Un supuesto esquema de pagos turbios en el que se usaban cheques a nombre de funcionarios “designados”, pero el dinero acababa en manos de terceros, sin rastro claro de a dónde iba a parar.
La denuncia sacó a relucir que entre 2021 y 2024 se manejaron fondos de manera irregular dentro de los programas Plan Temporal de Reactivación Económica Familiar y el famoso Operativo de Ornato y Embellecimiento, donde lo que menos hubo fue transparencia.
Según el informe que entregó la alcaldesa, los cheques se giraban y se cobraban, pero no hay documentos que indiquen quién recibió la plata, cuándo ni para qué. Encima, las listas de asistencia —que supuestamente justificaban esos pagos— están llenas de huecos: sin firmas, con tintas distintas y hasta con fotos de obras que no se hicieron o que ni siquiera corresponden a lo que se reportó.
Y eso no es todo. La denuncia también habla de sustracción y apropiación de fondos del Municipio. O sea, que no solo se perdió la trazabilidad, sino que hay plata que literalmente desapareció del mapa.
Este es el segundo round entre Hernández y Valdés Carrasquilla. Ya antes lo había denunciado por presuntamente retener cuotas de la Caja del Seguro Social. Ahora, con esta nueva bomba, la cosa pinta para largo y con capítulos que podrían terminar en los pasillos del juzgado.