En la provincia de Coclé se han registrado dos brotes de rabia paralítica bovina en Natá, corregimiento de Villarreal y en Toabré, al norte de Penonomé, indicó Juan Domínguez, director del MIDA.
Enseguida los ganaderos reportaron de la situación la regional envió a el personal de Salud Animal, que visitó las fincas donde se hizo la extracción de muestras para su envió al laboratorio, dando como resultado positivo por rabia.
Domínguez emitió la orden de que todos los hatos que están en un perímetro de 10 kilómetros a la redonda donde se reportaron los casos positivos, fueran vacunados. Además se estableció un cerco sanitario para evitar la movilización de los bovinos durante 21 días.
La rabia es una enfermedad mortal provocada por un virus que afecta el sistema nervioso central de todos los animales de sangre caliente principalmente bovinos, equinos, porcinos, ovinos/caprinos, incluyendo a los humanos que entran en contacto con animales enfermos.
Durante todo el año el Mida mantiene campañas de captura de hematófagos, y que a nivel nacional siempre se dan los brotes porque el murciélago emigra mucho.El virus está presente en la saliva del murciélago hematófago afectado, el que para alimentarse, muerde a su víctima y le trasmite el virus, el cual viaja al cerebro vía nervioso, multiplicándose continuamente.
La captura de los hematófagos se realiza a través de unas mallas especiales que se colocan en las fincas y una vez se atrapan los murciélagos.
En Veraguas se dieron también dos brotes uno en Calobre y otro en Santiago, los cuales están siendo controlados por el personal de Mida, Región 2. En este operativo se procedió a vacunar a todo el personal que trabaja directamente en la campaña.
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La vacunación es una de las medidas de prevención más efectivas para control de la rabia, por lo que los veterinarios del Mida, solicitan a los productores a estar pendientes que sus animales sean vacunados.
Entre los síntomas están la salivación en forma de hilo en bovinos, parálisis del tren posterior, cola levantada, dejan de comer y beber, mugen constantemente, se separan del rebaño, y finalmente caen en la postración y muerte.
