El esperado fin de semana largo en Panamá terminó en una pesadilla para decenas de personas. Según reportes del Cuerpo de Bomberos de Panamá en una embarcación que zarpo a la 1:00 pm del Viernes, al menos dos personas perdieron la vida, varios resultaron heridos con quemaduras, y otros fueron hallados desorientados y deshidratados, en medio de múltiples operativos de emergencia. Este naufragio ocurrió mar adentro en Isla Las Perlas en San Miguel.
El Teniente Eliecer Castillo y el Coronel Ángel Delgado, en declaraciones exclusivas, detallaron que se realizaron intensas labores de rescate que permitieron salvar a 20 personas en diferentes puntos del país. “Lo que parecía un momento de esparcimiento se transformó en una situación crítica”, comentó uno de los oficiales.
A través del SUME se coordinó la atención hospitalaria. En Isla Perico se estableció un área de concentración de víctimas, donde se clasificaron y trasladaron a los heridos según su condición.
Se reportaron traumatismos menores, algunas personas con quemaduras provocadas por el combustible derramado desde la embarcación, y otras presentaban desorientación y deshidratación por la exposición prolongada al sol y al mar.
Todos los afectados fueron llevados en condición estable a centros médicos, excepto dos personas que, lamentablemente, llegaron sin signos vitales.
En la operación participaron ambulancias del Cuerpo de Bomberos, la Cruz Roja, SUME, la Caja de Seguro Social y vehículos de intervención rápida, para brindar soporte adicional. También se contó con el respaldo del Ministerio de Salud, tanto para la coordinación de traslados como para ofrecer atención psicológica a los familiares de las víctimas.
Los heridos fueron trasladados a varios centros médicos de la ciudad, entre ellos: el Hospital Santo Tomás, el Complejo Hospitalario de la Caja de Seguro Social, la Policlínica del Marañón, el Hospital San Miguel Arcángel y, debido al volumen de afectados, dos pacientes fueron llevados al Hospital de la 24 de Diciembre.
La coordinación entre instituciones ha sido efectiva. Los cuartos de urgencia estuvieron habilitados para recibir a los pacientes, y la atención médica fue rápida y adecuada. Aún se mantienen algunas ambulancias en el área como medida preventiva, mientras continúan las labores de búsqueda de una persona desaparecida.
Para los familiares que necesiten información, se ha habilitado un punto en el área del SENAN, en conjunto con el Ministerio Público, donde se brinda orientación y apoyo.
Respecto a las recomendaciones para la población en este tipo de viajes, se insiste en seguir todas las medidas de seguridad: uso obligatorio de chalecos salvavidas, revisar las condiciones de las embarcaciones antes de zarpar y cumplir con las indicaciones de las autoridades marítimas.

Las declaraciones del Coronel Ángel Delgado El naufragio se reportó la tarde del día anterior, alrededor de las 3:30 p.m., cuando el capitán de la embarcación Gaspar contactó al Servicio Nacional Aeronaval (SENAN) informando que tenían problemas de navegación y que la embarcación comenzaba a hundirse.
Inmediatamente se activaron los protocolos de emergencia, desplegando recursos aéreos y navales que trabajaron hasta altas horas de la noche sin éxito en localizar a los tripulantes.
Durante la madrugada, y gracias a lo que se conoce como búsqueda por comunicaciones, se logró ubicar a dos mujeres sobrevivientes que habían sido rescatadas por una embarcación particular. Esta información permitió redirigir la operación de búsqueda, lo que resultó en el rescate de 20 personas.
Lamentablemente, se confirmó el hallazgo de dos cuerpos sin vida, ambos hombres, aún sin identificar. Las autoridades del Ministerio Público serán las encargadas de realizar la identificación formal con los familiares.
Hasta el momento, una persona (hombre) continúa desaparecida, y los operativos de búsqueda siguen activos con apoyo de medios aéreos, navales y embarcaciones del Benemérito Cuerpo de Bomberos y la Policía Nacional.
Entre los rescatados hay un menor de un año y medio, quien fue salvado con vida y se encuentra estable en un hospital.
La embarcación había partido desde el puerto de Amador con destino a la Isla San Miguel, donde los pasajeros participarían en actividades por la Semana Santa. Sobre si se excedió la capacidad permitida o las causas exactas del naufragio, eso deberá ser determinado por la Autoridad Marítima de Panamá.
El teniente reiteró la importancia de tomar medidas de seguridad antes de zarpar al mar, y destacó que el uso de chalecos salvavidas fue clave para la supervivencia de muchos de los pasajeros.
El Cuerpo de Bomberos aprovechó para reiterar el llamado a la precaución en paseos a ríos, playas o áreas boscosas, donde la falta de planificación puede tener consecuencias fatales. Mientras tanto, las familias afectadas viven momentos de angustia, y los equipos de rescate siguen activos ante cualquier nueva emergencia.