La Corte Suprema de Justicia (CSJ) ha ordenado el cierre del Juzgado Segundo Liquidador de Causas Penales, efectivo a partir del 1 de agosto de 2024, como parte de una reestructuración judicial. Esta decisión, establecida bajo el Acuerdo n°. 414 del 25 de julio de 2024, incluye la reasignación de casos y la reorganización del personal judicial.
El Juzgado Segundo Liquidador, hasta ahora bajo la dirección de la jueza Baloísa Marquínez, tenía 269 expedientes pendientes. Con el cierre, estos casos serán transferidos al Registro Único de Entrada (RUE), que los distribuirá al Juzgado Primero Liquidador de Causas Penales del Primer Circuito Judicial de Panamá. La mayoría de los casos involucran a reos rebeldes, lo que añade un nivel de complejidad a la transición.
A partir de la fecha de cierre, la jueza Baloísa Marquínez asumirá el cargo de jueza de Juicio Oral en el Sistema Penal Acusatorio (SPA). Además, Marquínez continuará ad honorem como jueza adjunta en el Juzgado Primero Liquidador de Causas Penales, con un enfoque especial en el caso “Odebrecht”, uno de los casos de corrupción más destacados en Panamá.
La reubicación del personal del Juzgado Segundo Liquidador será gestionada por la Secretaría Técnica de Recursos Humanos, bajo la dirección de la Sala Cuarta de Negocios Generales. Este proceso de reubicación se llevará a cabo para adaptar el personal a las nuevas necesidades institucionales.
El magistrado José Hoo Justiniani, presidente del Tribunal Superior Liquidador de Causas Penales del Primer Distrito Judicial, elogió el trabajo realizado bajo la dirección de Marquínez, destacando la reducción de la carga laboral pendiente en el juzgado.
Este cambio es parte de un esfuerzo más amplio para mejorar la eficiencia y la gestión de casos en el sistema penal de Panamá, marcando un nuevo capítulo en la estructura judicial del país.
