Los Dodgers no solo aseguraron el talento de Blake Snell y Roki Sasaki, sino que también esperan contar con Shohei Ohtani en la rotación a partir de mayo. Con nombres como Tyler Glasnow, Yoshinobu Yamamoto y Tony Gonsolin, los Dodgers tienen un arsenal de lanzadores que los convierte en el equipo más temido de la liga.
Pero, aunque el talento abunda, el riesgo de lesiones es una amenaza real. Glasnow, Yamamoto, Gonsolin y May han lidiado con problemas físicos en el pasado. Incluso Ohtani, quien ha demostrado ser un fenómeno tanto al bate como en el montículo, enfrentará su segunda recuperación de cirugía Tommy John.
Dave Roberts y su cuerpo técnico planean utilizar una rotación de seis hombres para reducir la carga de trabajo y evitar recaídas. Esta estrategia, utilizada por los Angels en la era Ohtani, podría ser clave para el éxito de los Dodgers en 2025. Además, la posibilidad de que Clayton Kershaw regrese tras su rehabilitación agregaría aún más profundidad al equipo.
Ohtani, de 30 años, viene de una temporada de ensueño: bateó para .310 con 54 cuadrangulares y 59 bases robadas, convirtiéndose en el primer jugador en la historia de la MLB en lograr una temporada 50/50. Si logra volver al montículo con el mismo dominio que mostró antes de su lesión, los Dodgers podrían estar encaminados a otro título de Serie Mundial.
La pregunta es: ¿podrán mantenerse en buenas condiciones durante toda la temporada? Con tantas estrellas, los Dodgers jugarán al límite entre la grandeza y la fragilidad.