¡La primera noche fue un éxito total! Con música, bailes, piezas únicas y mucha emoción, la edición 45 de la Feria Nacional de Artesanías arrancó este 30 de julio en las Islas de Atlapa y dejó claro que el arte panameño está más vivo que nunca.
Este gran evento, que se extenderá hasta el domingo 3 de agosto, resalta el trabajo de cientos de artesanos que, con sus manos, transforman fibras, metales y textiles en verdaderas obras de arte. Cada pieza no solo decora: cuenta una historia, transmite la herencia cultural de nuestros pueblos y preserva el alma de generaciones pasadas.
Además, la feria es un motor económico clave para cientos de familias artesanas y un atractivo turístico imperdible, donde tanto panameños como extranjeros se enamoran del talento local. Y eso se notó desde la apertura: los pasillos estaban llenos, las vitrinas brillaban y el calor humano se sentía en cada rincón.
La joya de la noche: Gloria Lina Hernández
Entre tantas emociones, una mujer se robó el corazón del público. La coclesana Gloria Lina Hernández fue reconocida como Maestra Artesana 2025 con la Orden de San José, una de las distinciones más grandes del arte popular nacional.
Con lágrimas en los ojos y voz firme, Gloria rindió homenaje a su abuela Rutina (q.e.p.d), a su madre de 84 años y a una vecina de infancia que la motivaron a no rendirse cuando el tejido le parecía difícil. “Contra pereza, diligencia, hija”, recordó, citando una frase que marcó su vida.
También agradeció a Sara del Carmen González, quien confió en su talento y la animó a inscribirse. “Nunca imaginé ser la homenajeada… este reconocimiento representa mi vida entera”, dijo con humildad.
Artesanos como Elsa Alveo de Mojica, Rolando Marín, Daniel Murillo y Yoscar de Gracia contaron a Mi Diario que este tipo de ferias les permite mostrar su arte, llevar sustento a casa y dejar en alto sus raíces.
El Ministerio de Cultura, encabezado por la ministra Maruja Herrera, agradeció el respaldo del presidente José Raúl Mulino y su esposa Marisell Cohen de Mulino. “El arte nos une y la cultura nos enriquece”, fue el mensaje que cerró la ceremonia.
El público que asistió compartió su entusiasmo con Mi Diario: “Todo está buenísimo, hay que venir. Aquí se siente el Panamá verdadero”.


