Este sábado 26 de julio, el equipo de Mi Diario salió a las calles con una misión llena de amor: homenajear a los abuelos panameños, esos pilares de la familia que siempre están firmes con su sabiduría, consejos y corazón gigante.
Con rosas en mano y muchas ganas de regalar sonrisas, llegamos hasta la Gran Estación de San Miguelito, donde conocimos historias que nos tocaron el alma.
Uno de los primeros en recibir su flor fue el señor Humber, quien caminaba solo, pero con sus nietos presentes en el corazón. Al recibir su rosa, nos compartió un mensaje que vale oro:
“Gracias, y a mis nietos que están en Chiriquí y en Bocas del Toro, que Dios los cuide y proteja siempre, pese a que no los vea a menudo”.
Más adelante, conocimos a Itzy, quien iba acompañada de su mamá, doña Felicita Caballero, también abuela. Ambas estaban realizando los trámites del sepelio del padre de Itzy, pero aun así se detuvieron a compartir con nosotros un momento especial.
“Ella es la más grande que tengo, mi mamá. Siempre ha estado conmigo en las buenas y en las malas”, nos dijo Itzy, muy emocionada.
Doña Felicita, con una rosa en mano y una mirada tierna, expresó lo que más desea en la vida:
“Tengo un solo nieto y él es como mi tercer hijo, porque tengo dos hijas. Solo le pido a Dios que me dé más años de vida para seguir pasando tiempo con él”.
Este Día de los Abuelos quisimos retribuir, aunque fuera con un gesto sencillo, todo el amor que ellos han sembrado por generaciones. Cada rosa entregada fue una historia viva, un recuerdo, un abrazo sincero.
Desde Mi Diario les decimos con el corazón:¡Feliz Día de los Abuelos, Panamá! Gracias por tanto.