Fue recibida con aplausos y despedida de pie por un público que durante dos horas disfrutó de los dioses africanos.
Diana Uribe es una colombiana talentosa, de voz cautivadora, quien sin duda tiene miles de fanes en Panamá, amantes de la historia, la cultura y de lo que nos une.
La noche del pasado sábado el Teatro Gladys Vidal de la Alcaldía de Panamá se quedó pequeñito. Había fila para entrar y hubo personas que tuvieron que quedarse afuera escuchando la ponencia 'Dioses africanos en costas americanas', como parte del programa África en América, dedicado al mes de la etnia negra.
Triángulo de la muerte
La experta en historia dejó claro de salida cómo los negros fueron vendidos, despellejados y exterminados en un comercio que se dio entre África, Europa y América.
Les quitaron todo, sus nombres, tierras, dioses, y a ellos solo les quedó su espiritualidad, su música, la huida y el tambor.
Recordó cómo seis millones de esclavos africanos fueron traídos a Brasil. Era la puerta sin retorno, todo lo de ellos era considerado brujería, superstición, relató.
Recordó que para Europa y su eurocentrismo, lo de ellos era medicina, religión y ciencia, pero para los negros de África era barbarie. Fueron invisibilizados, satanizados, y por eso esta historia hay que contarla.
Dioses y música
Explicó que como los negros no eran sujetos de ningún derecho, su resistencia fue la espiritualidad y por ello a través de su fe conservaron su alma y 'colaron' sus dioses del vudú, santería y hasta del rastafari, en un parecido con el cristianismo porque era lo que imperaba en América y Europa.
Uribe comentó que el vudú es la religión de Haití, el primer pueblo libre de la esclavitud de América; luego la santería con todos sus santos (yemayá, oshun, eleguá) son similiares a santos católicos y, posteriormente, en Jamaica los rastafari adoptan este misticismo etíope, pero todo esto era para resistir.
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Música
Dijo que toda la música sin África es aburrida. En su música está reflejado todo el dolor, pero también toda esa respuesta para no ser exterminados, reencontrarse y tener familias.
La colombiana intercaló toda su exposición con música de Matamoros, de Cuba; Capoeira, de Brasil; Bob Marley, de Jamaica; y del Brujo de Borinquen, Ismael Rivera, de Puerto Rico.
'Nuestra cultura sin el África no existe, no nos quedaría nada', concluyó Uribe en medio de aplausos.
Por: Lorenzo Ábrego
Fotos: Raúl Valdés
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Diana Uribe. Hace que la historia sea atractiva e interesante.
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