Lejos de volver voluntariamente, el expresidente Ricardo Martinelli fue traído de vuelta al país por parte del gobierno de Estados Unidos en un proceso de extradición para que enfrente acusaciones penales en Panamá.
Sin embargo, todo este trámite le ha parecido, aparentemente muy divertido al exmandatario, quien cual rey de carnaval, se la ha pasado buscando las cámaras, sonriendo y saludando, haciendo gestos de victoria con sus brazos y manos.
A Martinelli no se le ve ni un poquito acongojado o afligido, no pareciera que le doliera ni un dedo', manifiestan internautas en redes sociales.
Y es que se ha mostrado muy contento, alegre y divertido, contrario a lo que ha venido señalando su esposa, la exprimera dama Marta de Matinelli, quien asegura que el expresidente se encuentra delicado de salud y se siente mal.
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Una cosa es lo que se ve y otra lo que se tiene por dentro', explicaba la exprimera dama.
Desde que salió de Miami Martinelli ha gritado a los cuatro vientos que está listo para ver el mundial.
Voy a ver a la Selección. Ojalá ganemos. Que Varela no los sale', dijo en imágenes captadas por Telemetro.
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Martinelli durante la mañana se mantuvo con el atuendo caqui de detenido, aunque sus familiares le llevaron ropa para cambiarse.
A la esposa le dejaron pasar a verlo junto a su hija. Era la primera vez en mucho tiempo en que tenían contacto físico, ya que ellas no habían podido viajar a verlo en Miami ni él quería regresar a Panamá.
Martinelli se paró en una ventana desde donde podía saludar a algunos de sus simpatizantes y familiares que fueron hasta El Renacer a respaldarlo. Agitaba los brazos con efusividad y pegaba gritos cada vez que saludaba y sonreía.
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REDACCIÓN MI DIARIO / WEB