La violencia sigue azotando las calles de Panamá. En menos de 24 horas, dos homicidios han sacudido a Las Mañanitas y Tocumen, elevando a 11 la cifra de asesinatos en los primeros días de marzo. El primer caso ocurrió en un minisúper en el sector No.1 El Viejo, Las Mañanitas, donde un hombre de 47 años murió tras recibir múltiples disparos en un asalto. Cuatro delincuentes irrumpieron en el local, robaron la caja registradora y al huir se enfrentaron en un tiroteo con el comerciante. La víctima recibió impactos de bala en el brazo y el estómago, siendo trasladada al Hospital Irma De Lourdes Tzanetatos, donde se confirmó su muerte. Los asaltantes escaparon en un Kia y no han sido capturados.
Horas después, en Santa Elena, Tocumen, un menor de 15 años fue ejecutado de un disparo en la cabeza, en lo que sería un ajuste de cuentas. Según versiones extraoficiales, los atacantes buscaban vengar un homicidio anterior en el que supuestamente participó la víctima. Vecinos alertaron a la Policía Nacional tras escuchar detonaciones y ver un vehículo Picanto rojo huir del lugar. Al llegar las unidades policiales, confirmaron el hallazgo del cuerpo del adolescente en el suelo.
A pesar de los operativos de búsqueda, no se han reportado aprehendidos en ninguno de estos homicidios, lo que ha generado preocupación en las comunidades afectadas. Residentes de Las Mañanitas y Tocumen han expresado su temor ante el aumento de la criminalidad y exigen mayor presencia policial para frenar la ola de violencia que sigue cobrando vidas en la capital.
Con estos hechos de sangre, la cifra de asesinatos en Panamá asciende a 11 en lo que va del mes, sin que hasta el momento las autoridades logren capturar a los responsables. La incertidumbre y el temor se apoderan de los ciudadanos, mientras la delincuencia sigue actuando impunemente en las calles.
