Némesis Tiare Rodríguez Sánchez, de 23 años de edad, pasará 20 años en prisión por el asesinato de Alberto Rodríguez Alfaro, de 44 años.
El cuerpo del abogado fue hallado el 2 de marzo del 2016, envuelto en sábanas en medio de un herbazal, a unos metros en la vía hacía Las Trancas, corregimiento de Rufina Alfara distrito de San Miguelito.
El cadáver gracias a un tatuaje que tenía en un brazo que decía “Todas Mienten”, fue como lograron identificar que se trataba de un jurista quien trabajaba en una firma de abogados.
La víctima dejo cuatro hijos en orfandad y en una de sus últimas publicaciones de Facebook le dedico este mensaje.
Los cansaré, me enfadare con ustedes, gritaré como loco, les llamaré la atención, les repetiré mil veces las cosas, seré su peor pesadilla, los seguiré cuándo sea necesario, y saben¿por que? Por que los amo. Cuando puedan comprender esto, sabre que ya son responsables...nunca!! Encontrarán a nadie que los ame, que se preocupe y a quién le importes más que mi, sin ningún interés sólo amor PATERNALCorrespondió al fiscal de Homicidio, Oscar Toribio, realizar las investigaciones que permitieron llevar a los tribunales a la mujer que mantuvo una relación sentimental con la víctima, ya que en la escena se encontró un guante de látex con rastro de sangre que coincidió con la mujer.
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Además los resultados de la necropsia practicada al cuerpo reveló que el ahora occiso se encontraba amarrado e imposibilitada para defenderse le provocaron múltiples lesiones en su anatomía, causada por golpes, patadas y heridas causadas por un palo de madera hasta matarlo.
Su homicidio se registro el 25 de febrero del 2016, según la investigación en la que se detalla que el día anterior fue visto por última vez luego de salir de su residencia ubicada en Vista Alegre de Arraiján, por lo que días después cuando fue ubicado en avanzado estado de descomposición.
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Dichos elementos fueron determinantes para que el Ministerio Público lograra un veredicto de culpabilidad por el cargo de homicidio doloso agravado en calidad de cómplice primario. Y es que también la Fiscalía acreditó que la mujer traspaso a su nombre el carro Hyundai Santa Fe de la víctima, para luego venderlo por la suma 8 mil 700 dólares a una empresa que le pagó en cheque y una parte del dinero lo depositó en un banco de la localidad.
