Era su primer día de trabajo, pero jamás imaginó que se convertiría en la peor pesadilla de su vida.
Yamileth Castillo, de apenas 24 años, llegó a la casa de su expareja en Pocrí de Aguadulce, en busca de apoyo para que cuidara a sus hijas mientras cumplía con un nuevo reto laboral.
Sin embargo, lo que empezó como un intento de reconciliación familiar terminó en una escena sangrienta.
Apenas Yamileth pisó la vivienda, se desató una acalorada discusión. El sujeto, enceguecido por la ira, le arrebató el celular y la atacó brutalmente con un cuchillo, asestándole cinco puñaladas que por poco le arrebatan la vida.
El taxista que había llevado a la joven al lugar fue quien la auxilió de inmediato, llevándola al Hospital Regional Rafael Estévez de Aguadulce. Además, fue él quien alertó a los vecinos sobre el horror que acababa de ocurrir.
La Policía Nacional no tardó en seguirle el rastro al agresor, quien finalmente se entregó el lunes en Calobre, Veraguas.
La Sección de Homicidio y Femicidio de la Fiscalía Regional de Coclé confirmó su detención provisional, bajo cargos de tentativa de femicidio agravada.
El Ministerio Público argumentó que el agresor representa un peligro de fuga, podría destruir pruebas e incluso intentar atentar nuevamente contra Yamileth, por lo que el juez avaló su detención y dio un plazo de seis meses para concluir la investigación.
Las cifras son alarmantes: hasta abril se habían registrado cinco femicidios y seis tentativas, además de cinco muertes violentas de mujeres a nivel nacional, con enero como el mes más oscuro, según el Ministerio Público.