Un trabajador portuario de aproximadamente 40 años fue sorprendido por la muerte en la mañana de hoy, justo después de terminar su jornada.
El hombre había estacionado su vehículo en la barriada Villas Lago Emperador, en el corregimiento de Juan Demóstenes Arosemena, distrito de Arraiján, para ir a comprar su desayuno, sin imaginar que sería su última parada.
Según los primeros reportes, el infortunado sospechó que algo andaba mal. Al notar movimientos extraños, intentó correr hacia su residencia, pero no logró escapar. Dos sujetos en moto lo siguieron y le dispararon sin piedad.
Testigos contaron que todo fue muy rápido. Los sicarios lo alcanzaron y le dispararon repetidamente. Al menos 19 casquillos de bala quedaron regados en el pavimento, prueba del brutal ataque.
El hombre quedó tendido en plena vía, sin vida, mientras vecinos y curiosos se acercaban con miedo y asombro.
La zona fue acordonada por unidades de la Policía Nacional, quienes junto al Ministerio Público iniciaron las diligencias para tratar de esclarecer el móvil del crimen.
Mientras tanto, la comunidad permanece conmocionada por el hecho violento que empañó la mañana en este sector de Arraiján.