¡Sangre y violencia sacuden a Panamá! El país vivió un fin de semana mortal entre el viernes 13 y el lunes 16 de septiembre, con ocho asesinatos perpetrados en distintos puntos, dejando una estela de muerte y terror que afecta a San Miguelito, Colón y Calidonia.
La primera víctima cayó la noche del viernes 13 de septiembre, cuando Guillermo Labastida Wardrobe, paramédico del Sume 911, fue encontrado sin vida dentro de un vehículo de plataforma en el sector de “La Balbinita”, Los Andes N°2. El hombre, en ropa interior y con la boca sellada con cinta adhesiva, presentaba múltiples disparos en el cuerpo. El asesinato, ocurrido a las 10:00 p.m., fue el inicio de una cadena de crímenes que no dio tregua durante el fin de semana.
Esa misma noche, en Viento Frío, Colón, Julián Alejandro Sinclair Best, de 19 años, fue asesinado a tiros por varios sujetos mientras estaba en una residencia cerca de la escuela de la comunidad. Sinclair fue atacado brutalmente con seis disparos y falleció en el centro de salud de Portobelo a las 11:15 p.m. Este crimen dejó a otra persona herida, quien fue trasladada de emergencia a la Policlínica de Sabanitas.
La madrugada del domingo 15 de septiembre, la violencia se trasladó a Cerro Cocobolo, San Miguelito, donde el pandillero Carlos “Calito” Varela fue asesinado en otro enfrentamiento armado. Este incidente dejó un saldo de un muerto y un herido, manteniendo a la comunidad en constante estado de alerta. Pocas horas después, en el vertedero de Cerro Patacón, pepenadores descubrieron el cuerpo sin vida de Alexis “Abuelón” Cornelio, otro miembro de pandillas conocido en la zona. Las autoridades creen que su muerte está vinculada a un sangriento enfrentamiento ocurrido la noche anterior.
El lunes 16 de septiembre no fue la excepción. A las 12:00 p.m., otro hombre fue asesinado a tiros mientras lavaba un vehículo en la calle Mariano Arosemena, frente al edificio Magnolia en Calidonia. El hombre, cuyo nombre aún se desconoce, tenía antecedentes penales por delitos relacionados con drogas y un oficio de captura vigente. A pesar de ser trasladado al Hospital Santo Tomás, su muerte fue confirmada poco después.
Más tarde ese mismo día, en Villa del Caribe, Colón, Arturo Omar Lee MacPherson, de 37 años, fue acribillado mientras conversaba afuera de su casa. Aunque fue llevado al Hospital Manuel Amador Guerrero, los médicos no lograron salvarlo.
Con estos hechos violentos, el mes de septiembre ya contabiliza 28 homicidios, y la cifra sigue en aumento. Las comunidades están sumidas en el miedo, mientras las autoridades continúan sus investigaciones sin capturas importantes hasta el momento.
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