Un episodio desgarrador ha sacudido a la comunidad de Solon, en la provincia de Bocas del Toro, al conocerse la trágica historia de Edisa Gamarra, una joven madre de 25 años, quien fue brutalmente asesinada por su pareja en lo que se presume fue un ataque de celos. El hallazgo del cuerpo de Edisa, enterrado a orillas del río Teribe, ha dejado a tres pequeños huérfanos y a toda la región sumida en la tristeza y la indignación.
Una vida truncada por la violencia
Edisa, quien trabajaba como empleada doméstica para comprar unos lentes que su hijo necesitaba, fue reportada como desaparecida el 7 de agosto. Sin embargo, sus familiares desconocían su paradero desde el 3 de agosto, y su búsqueda culminó en la tarde del lunes, cuando los propietarios de una finca en la comunidad de Solon, corregimiento de Bonyick, comarca Naso Tjër Di, descubrieron su cuerpo sin vida, cubierto de arena y en avanzado estado de descomposición, a tan solo diez minutos de la comunidad.
Una madre que lo dio todo por sus hijos
Edisa era conocida por su dedicación y sacrificio. A pesar de su juventud, bregaba incansablemente por el bienestar de sus hijos, quienes ahora quedan en la orfandad. “Era una madre ejemplar, siempre luchando por sacar adelante a sus pequeños,” comentó una docente que conocía de cerca a la joven. Sus hijos, un niño de 7 años en segundo grado, una niña de 6 en primer grado y un niño de 4 en prekínder, han perdido a la persona que más los amaba, víctimas indirectas de una violencia que sigue azotando a las mujeres en Panamá.
El dolor de una comunidad
El presunto asesino, conocido como “Chino”, de 27 años, se entregó a las autoridades y ahora enfrenta cargos por este atroz crimen. Este es el segundo caso de femicidio registrado en Bocas del Toro este año, un reflejo de la creciente ola de violencia que está arrasando con la vida de mujeres inocentes en el país. En lo que va del año, ya se han registrado 28 asesinatos de mujeres, 12 de ellos catalogados como femicidios, mientras que en 2023 se contabilizaron 46 muertes, de las cuales 15 fueron femicidios. El año anterior, 41 mujeres fueron asesinadas, 21 de esos casos fueron tipificados como femicidios.
Exigencia de justicia y acción
El asesinato de Edisa ha dejado una cicatriz profunda en la comunidad de Solon, donde sus vecinos aún no pueden creer la magnitud de la tragedia. “Esto no debería pasarle a nadie, menos a una madre tan joven y luchadora,” expresó un residente visiblemente afectado. Este crimen ha puesto en evidencia la urgencia de tomar medidas más drásticas para combatir la violencia de género en Panamá, un flagelo que no solo destruye vidas, sino que deja un vacío irremplazable en las familias y comunidades.
#PGNinforma | Personal de la Fiscalía, en conjunto con @protegeryservir, Criminalistica y Medicina Legal @IMELCFPANAMA se mantienen en el lugar, realizando diligencias de campo. Foto del lugar del hecho. pic.twitter.com/JIeks4PwPh
— Procuraduría General de la Nación (@PGN_PANAMA) August 13, 2024


