La Chorrera está conmocionada. Un médico del Hospital Nicolás A. Solano, acusado de violación agravada, ha sido enviado a prisión por orden del Tribunal Superior de Apelaciones. La justicia panameña soporta su postura y revoca la medida de arresto domiciliario, desatando indignación y un nuevo debate sobre la seguridad en los centros médicos.
El escándalo estalló la madrugada del 4 de marzo, cuando una paciente de 22 años denunció haber sido víctima de una agresión sexual dentro del hospital. La acusación cayó sobre un profesional de la salud que, en lugar de brindar atención médica, presuntamente abusó de su posición para cometer el crimen.
Durante la audiencia de apelación, la Fiscalía presentó pruebas contundentes que convencieron a los magistrados de que la detención domiciliaria era insuficiente. Con un fallo unánime, el Tribunal ordenó la prisión preventiva del galeno y ratificó su suspensión del cargo.
La gravedad del delito exige medidas severas
El Ministerio Público, representado por el fiscal Julio Alonso, argumentó que los riesgos procesales y la naturaleza del delito justificaban una medida más estricta. La defensa del médico, a cargo del abogado David Ladrón de Guevara, intentó evitar la detención provisional, pero la decisión del Tribunal fue tajante.
“Este caso no puede tomarse a la ligera”, afirmó una fuente judicial. “Estamos hablando de un abuso dentro de un hospital, un espacio donde las personas confían en recibir atención y seguridad”.
#Decisión | La Sección de Delitos contra la Libertad y la Integridad Sexual de Panamá Oeste, logró la revocatoria del depósito domiciliario impuesta a un médico. y se ordenó su detención provisional por violación agravada, ocurrida el 4 de marzo, en el Hospital Nicolás A. Solano. pic.twitter.com/Jz4PbeEsKF
— Procuraduría General de la Nación (@PGN_PANAMA) March 14, 2025
