La lectura en papel es el proceso de leer textos impresos en medios físicos como libros, cuadernos, revistas o periódicos. Implica el manejo directo de las páginas, y suele asociarse con una experiencia más táctil y concentrada.
Mientras que la lectura digital es el proceso de leer textos a través de dispositivos electrónicos como computadoras, tablets, lectores electrónicos (e-readers) o teléfonos inteligentes. Este tipo de lectura permite acceder a gran cantidad de contenido de manera inmediata y flexible, con funciones interactivas y personalizables.
Ambos tipos de lectura tienen ventajas y desventajas:
Lectura en papel
Ventajas:
-Menor fatiga visual: La lectura en papel reduce la fatiga visual porque no emite luz directa como las pantallas.
-Mejor comprensión y retención: Varios estudios indican que los lectores tienden a recordar mejor lo que leen en papel.
-Menos distracciones: No hay notificaciones ni interrupciones como en dispositivos electrónicos.
-Facilidad para subrayar o anotar: Aunque las herramientas digitales permiten esto, muchos prefieren hacerlo directamente sobre el papel.
Desventajas:
-Portabilidad: Llevar varios libros puede ser incómodo.
-Costo y espacio: Los libros físicos requieren espacio para almacenarse y suelen ser más caros.
-Accesibilidad: Menor disponibilidad inmediata en comparación con los formatos digitales.
Lectura en digital
Ventajas:
Portabilidad y acceso inmediato: Se pueden almacenar miles de libros en un solo dispositivo y acceder a ellos en cualquier momento.
Funciones adicionales: Buscadores de palabras, diccionarios instantáneos, hipervínculos, notas digitales y sincronización entre dispositivos.
Ajuste del texto: Se pueden modificar tamaño de letra, interlineado y brillo para mayor comodidad.
Costo y sostenibilidad: Suele ser más barato y ecológico, al no necesitar papel ni tinta.
Accesibilidad para personas con discapacidad: Los lectores electrónicos pueden ofrecer lectura en voz alta, ampliación de texto y modos de alto contraste.
Desventajas:
Fatiga visual y problemas oculares: La exposición prolongada a pantallas retroiluminadas puede causar molestias.
Distracciones: Las notificaciones, redes sociales y otras aplicaciones pueden interrumpir la lectura.
Dependencia de batería y dispositivos: Necesidad de energía para cargar los dispositivos.

La noche de Tlatelolco
“Eran las cinco de la tarde y hacía un calor como de abril. Subimos a la Plaza de las Tres Culturas, que es un lugar muy abierto y lleno de edificios grandes y modernos, con balcones que parecían mirarnos. En ese momento nos sentimos poderosos y valientes porque todos estábamos juntos y gritando, ‘¡No queremos represión!’. Pero de pronto llegaron los soldados, y aunque al principio pensamos que no iba a pasar nada, empezaron a disparar y a lanzarnos gases lacrimógenos. Corrimos sin saber a dónde, algunos se tiraron al suelo, otros intentaron ayudar a los heridos. Yo solo pensé en que debía salir de ahí, escapar como fuera, pero había tanta gente y tanto miedo que era imposible moverse”.
Este fragmento refleja con gran fuerza la atmósfera de tensión y miedo que rodeó la masacre de Tlatelolco. La autora, Elena Poniatowska, emplea un lenguaje directo y sencillo para transmitir el impacto emocional del suceso. A través de la voz testimonial, la narradora describe el contraste entre la esperanza inicial de los manifestantes, que se sentían “poderosos y valientes”, y el miedo y el caos que desataron los disparos y gases lacrimógenos.
El recurso del testimonio, una de las características distintivas de esta obra, permite que el lector se sienta más próximo a la experiencia, casi como si estuviera en medio de la escena. Además, la descripción de la Plaza de las Tres Culturas como un espacio abierto y con balcones, que “parecían mirarnos”, personifica los edificios y otorga a la ciudad un papel casi cómplice del horror.
Este pasaje, aunque breve, encapsula la tragedia humana del 2 de octubre de 1968, evidenciando la represión y el sufrimiento, y es representativo del estilo de Poniatowska: comprometido, empático y profundamente humano.

Elena Poniatowska
Nació el 19 de mayo de 1932 en París, Francia. Es una destacada escritora, periodista y activista mexicana. Hija de madre mexicana y padre de ascendencia noble polaca, se trasladó a México en 1942 debido a la Segunda Guerra Mundial. Su obra se caracteriza por su compromiso social, enfocándose en temas de justicia, derechos humanos y la situación de los marginados.
Poniatowska ha cultivado diversos géneros, desde la novela hasta el reportaje, y es especialmente reconocida por su libro “La noche de Tlatelolco” (1971), donde documenta la masacre estudiantil de 1968 en México. Ha recibido numerosos reconocimientos, incluyendo el Premio Cervantes en 2013, siendo la cuarta mujer en obtenerlo.
Elena Poniatowska es considerada una de las figuras más relevantes de la literatura y el periodismo en lengua española, y su obra sigue siendo leída y estudiada por su profundidad y compromiso con la realidad social.


