La provincia de Urbino, en Italia, es conocida mundialmente por ser la ciudad natal del gran Rafael, uno de los más destacados pintores y arquitectos del Renacimiento. Pero Urbino es algo más. Es donde el 20 de mayo de 1916 nació, concretamente en una población llamada Sant'Ippolito, Giusseppe Ottaviani, un antiguo piloto de aviación que luego ejerció como sastre.
NOTA RELACIONADA: En pleno vuelo el piloto de un avión se quitó la ropa y se acostó a descansar
Ahora, a sus 102 años, es campeón del mundo de salto de longitud. Siempre le había gustado el deporte y, en concreto, el atletismo.
Campo a través, correr por el campo, es lo que más me divertía cuando era más joven'. Pero un día, viendo por televisión un campeonato de veteranos, decidió que por qué no volvía a sentir esa sensación de correr. 'Si ellos lo hacían con mi edad, me preguntaba por qué no podía yo. Así que lo hice', comenta a MARCA Ottaviani.
Tenía 75 años y desde entonces no ha dejado el tartán en ningún momento. Ya fuera en pista cubierta o al aire libre, corriendo 100 metros o saltando altura o lanzando jabalina.
TAMBIÉN PUEDES LEER: Cientos de monedas de oro del imperio romano se encontraron en antiguo teatro
Con 95 años ganó 10 medallas en un campeonato y batió varios récords del mundo', cuenta su hijo Paolo, quien lo acompaña en todas las competiciones a las que acude y ejerce como entrenador y consejero.
Porque 'Peppe', como le llaman, no se cansa. Quiere seguir escuchando los aplausos de los aficionados, el calor del público, la adrenalina que le produce pisar el tartán. Ya no hace velocidad ni lanzamientos, pero sí salta longitud y triple. En Málaga se ha proclamado este martes campeón del mundo de longitud con una mejor marca de 0,85 metros.
Si hubiera sido la competición por la tarde, seguro que habría llegado al metro. He tenido un nulo por poco que también estaba por encima del metro', explica de modo inconformista pensando ya en su próximo evento, el triple salto de este miércoles, una prueba más dura para las rodillas y que nadie de 100 años o más se ha atrevido a realizar hasta ahora. Él sí, el primero de la historia. Con 95 años ganó 10 medallas en un campeonato y batió varios récords del mundo', concluye.
Mientras tanto, su mujer, Alba, de 94 años, y sus otras dos hijas, aguardan en casa noticias suyas.
TE RECOMENDAMOS: Mujer que fue diagnosticada con cáncer terminal planeó la despedida de sus hijos
Bravo, enhorabuena por la competición', le dice al teléfono a su mujer tras ganar el oro. Y Peppe responde: 'Te mando un beso, gracias por el cumplido. Eres lo más importante de mi vida'.
Una vida en la que disfruta de todo. Se para a hablar con todo el mundo, responde a los vítores levantando los brazos, se hace fotos con gusto, no se priva de una buena comida.
Un showman en la pista, que sabe ganarse al aficionado como si fuese Usain Bolt o el mítico Carl Lewis. Pero él es Giusseppe Ottaviani. Y tan feliz. Un héroe del Mundial de Atletismo Máster.
Un campeón del mundo de 102 años, el menos joven del campeonato. ¡Bravo, bravísimo, Peppe!
CHEQUEA EL VIDEO
Bravo por este campeón del mundo de longitud... ¡¡con 102 años!! pic.twitter.com/JVALQVQROU
— MARCA (@marca) September 11, 2018
Nota por Marca