Si bien en las redes sociales ahora la exposición sobre la moral de las personas es un pan nuestro de cada día, pero antes de la aparición de las redes sociales, Monica Lewinsky vivió en carne viva el escarnio público a nivel mundial.
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Lewinsky se ha convertido en activista y recientemente fue entrevistada por John Oliver en su programa de HBO , 'Last Week Tonight'. En esta interesante conversación Lewinsky vuelve a cobrar relevancia en un statu quo de humillaciones diarias que peligra con corromper todavía más el debate público (y las vidas de aquellos recipientes del ciberacoso en las redes), reseña la revista Vanity Fair.
Con 24 años, fue muy difícil agarrarse a una pizca de dignidad o autoestima cuando sabes que eres el tema de tantos chistes', expresó Lewinsky en su entrevista con Oliver recordando la humillación que sufrió tras la publicación del escándalo sobre su relación sexual con el expresidente estadounidense Bill Clinton.
La que fuera recordada como becaria de la Casa Blanca recuerda que fueron las bromas sobre su aspecto físico las que mayor incidencia tuvieron sobre su estado emocional.
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Parte de mi vanidad viene de las heridas porque se hicieran chistes sobre mi peso o porque la gente dijera que era poco atractiva. Fue terrorífico no solo porque me estaba viendo a mí misma, o a una versión de mí misma, escapar de mí, sino porque de alguna forma me robaron mi identidad'.
Mónica reveló en la entrevista lo complicado que le fue luego de esto encontrar trabajo y agregó que a veces solo la querían por la atención mediática que la acompañaba.
¿Pensó en cambiarse el nombre?
Primero, no creo que hubiera servido de nada. Pero creo que también fue una decisión basada en principios. Bill Clinton no tuvo que cambiarse el nombre. Nadie se lo ha preguntado nunca. ¿Pensó él que debía cambiarse el nombre?', indicó Lewinsky en la entrevista.
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Creo que fue una declaración importante. No estoy orgullosa de todas las decisiones que he tomado en mi vida, pero estoy orgullosa de la persona que soy', añade Lewinsky sobre la decisión de no cambiar su nombre. 'No me avergüenza quién soy y creo que, pese a lo difícil que ha sido a veces tener este apellido o el dolor que he sentido por lo que significó para otras personas en mi familia que lo comparten, estoy contenta de no haberlo cambiado'.
A la pregunta sobre si su situación ocurrido en tiempos de las redes sociales hubiese empeorado su situación Mónica respondió:
Creo que con la llegada de Internet y, por supuesto, de las redes sociales, ahora tenemos situaciones que se agravan más de lo que uno podría haber imaginado en un primer momento. Y el anonimato ha permitido que la gente cree nuevos personajes a partir de sí misma'.
Lo que Lewinsky sí admite es que la posibilidad de bloquear a aquellos que la insultan en Twitter es empoderadora.
Mónica finalizó la entrevista enviándole un poderoso mensaje a la juventud.
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Sé que parece que en este punto de tu vida será definido para siempre por esto, pero no será así. Puede que sea difícil, puede que lleve más tiempo de lo que jamás habrías imaginado, pero puedes superarlo' finalizó la exbecaria.
Lo que para muchos jóvenes al enfrentar una situación penosa, pareciera ser el fin del mundo, algún día pasará y se puede superar tal y como lo hizo Mónica Lewinsky.
La exbecaria que saltara a la fama por su romance con Bill Clinton fue entrevista por HBO.
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