Con la muerte de Fidel Castro vuelven a tomar protagonismo los famosos WikiLeaks. Y es que revelaron detalles que se mantenían ocultos sobre la enfermedad del líder cubano.
Raúl Castro informó al mundo la noticia de la muerte de Fidel, pero nunca se refirió a las causas, porque su enfermedad fue considerada un secreto de Estado y nunca fue revelada oficialmente.
Desde que dejó el gobierno en 2006 el estado de salud de Fidel se mantuvo en reserva, despertando muchos rumores.
'En la situación específica de Cuba, debido a los planes del imperio (Estados Unidos), mi estado de salud se convierte en un secreto de Estado', dijo el propio Fidel, tras anunciar en julio del 2006 que entregaba el poder a su hermano Raúl por razones de salud.
Bueno, los cables filtrados por WikiLeaks revelaron que Castro pudo morir con 'un deterioro notable de sus facultades mentales'.
'Castro atraviesa un estado terminal y sufrirá un inevitable deterioro de sus facultades mentales hasta el momento de su muerte. Pero no va a morir inmediatamente', escribió Michael Parmly, el entonces jefe de la misión diplomática de Estados Unidos en Cuba.
Y agregó:
'Creemos que un regreso definitivo es improbable', decían los informes hace aproximadamente un año atrás.
Estos datos filtrados parecen coincidir con el diario español El País que reveló en 2007 que Castro padecía de diverticulitis y su pronóstico era 'muy grave', tras una serie de operaciones fallidas para contener una infección en su intestino grueso. El periódico citó dos fuentes médicas anónimas del hospital Gregorio Marañón de Madrid, cuyo jefe de cirugía visitó a Castro en diciembre en La Habana
Según estos informes secretos o WikiLeaks , la hemorragia intestinal que sufrió Fidel Castro tuvo lugar a bordo de un avión que viajaba de Holguín a La Habana, un trayecto de 734 kilómetros. No había ningún médico arriba de la nave, que debió aterrizar de urgencia para internar al paciente.
Los datos aparecen en un informe médico cubano asumido como creíble por la sección de Intereses de Estados Unidos en La Habana, que luego fue transmitido al Departamento de Estado.
El informe médico que llegó a Washington no indica cuáles son las fuentes, pero quien recogió la información parece haber tenido acceso a datos cruciales.
'La enfermedad comenzó en el avión de Holguín a La Habana (nota: después de un día de intensas actividades, el 26 de julio del 2006. Fin de la nota)'.
Al ser un vuelo corto y no haber médico a bordo tuvieron que aterrizar urgentemente al detectarse la hemorragia. Le fue diagnosticada diverticulitis de colon, que consiste en la inflamación de los divertículos, protuberancias en el tramo final del intestino, que en el caso de Fidel Castro le causaron una gran hemorragia.
El líder cubano presentaba una perforación en el intestino grueso y necesitaba una colostomía, una abertura en la parte exterior del abdomen para hacer sus necesidades, eliminar los productos de desecho hasta que sanara el colon o se le efectuara otra cirugía para sustituir el ano, 'a la que (Castro) se opuso, diciendo que debían cortar la parte infectada y empalmar el intestino al colón.
El doctor (Eugenio) Selman, jefe del equipo, estuvo de acuerdo, pero el resto de médicos se opuso. Fidel, caprichosamente, se opuso', prosigue el informe. 'Con el paso del tiempo, y al haberse infectado el colon, la operación falló y la parte empalmada se separó. Tuvieron que operarle de nuevo, pero se toparon con una fístula (una conexión anormal entre dos órganos), cuya existencia desconocían'.
BAJÓ DE PESO
El informe explica que normalmente una fístula bloquea la digestión, y esa sería la causa por la que Fidel Castro habría perdido 18 kilos. Además se explica que el paciente debió ser alimentado con suero. 'Utilizaron un aparato fabricado en corea para tratar la fístula pero sin mucho éxito', se indica.
En ese momento se llamó al médico español José Luis García Sabrido, quien descartó la existencia de un cáncer 'y dijo que el equipo cubano había hecho lo que creyó conveniente pero que lo correcto hubiera sido una colostomía'.
FUERTE
A la edad de Fidel Castro la enfermedad no era curable, según el informe, y no le permitiría volver a la cúspide del mando activo en Cuba. 'No morirá inmediatamente, pero progresivamente perderá sus facultades y se debilitará más hasta que sobrevenga el fallecimiento'.
Así parece haber sucedido. Veremos si el gobierno cubano rinde finalmente un informe oficial de las causas del falllecimiento o sigue con el misterio. Lo cierto es que desde que empezaron sus males en 2006, el líder cubano resistió diez largos años. Tenía 90 años de edad. al momento de morir.



