El albinismo no es más que una rara condición genética caracterizada por la ausencia congénita de pigmentación de ojos, piel y pelo en humanos y animales. Es hereditario y aparece con la combinación de dos portadores del gen recesivo.
Pero hay ciertos lugares en los que ser albino puede costar la vida, en un continente lleno de prejuicios sociales han convertido a los albínos en víctimas de asesinatos, rituales de magia y comercio de cuerpos.
El albinismo en África es estigmatizado, en lugares como Tanzania y Malawi, personas que lo padecen son secuestradas e incluso asesinadas porque se cree que sus extremidades son mágicas y por tanto las utilizan para realizar 'pociones curativas'.
Aunque pueden presentar problemas serios de visión y la piel blanca de los que lo de padecen debe protegerse de la luz solar para evitar quemaduras o desarrollar algún tipo de cáncer de piel, en lineas lineas generales, los albinos pueden llevar una vida normal.
Para ellos no es nuevo ser abandonados por sus propias familias, sufrir la discriminación en la escuela y sentirse condenados a mendigar por la falta de oportunidades para encontrar cualquier tipo de trabajo. Pero sí es nuevo el miedo de sentir que su piel tiene precio.
Las noticias sobre su persecución y asesinato en distintos países del continente africano han sido cada vez más frecuentes en los últimos años; una situación provocada por el aumento de un siniestro comercio en el que las mercancías son diferentes partes de sus pálidos cuerpos.
En los últimos meses docenas de ellos han sido asesinados y partes de sus cuerpos acaban en un macabro contrabando alimentado por el fetichismo y la superstición.
Vía: Su Noticiero.com