Cuando usted va a comprar cualquier artículo tiene el derecho de preguntar sobre el funcionamiento de este, su costo, durabilidad, garantía y muchas interrogantes más, y quienes le ofrecen el producto tienen el deber de responder a cada una de sus peticiones.
Sin embargo, son pocos los compradores que se detienen a preguntar y conocer más sobre determinado producto existente en el mercado.
No fue hasta el año 1962 cuando en un hecho sin procedentes, el entonces presidente de los Estados Unidos, John F. Kennedy, se dirigió al Congreso de su país dándole una visión acerca de los derechos del consumidor, convirtiéndose en la primera acción de ese tipo llevada a cabo por
un político.
A raíz de este trascendente hecho, cada 15 de marzo se celebra a nivel mundial el Día Mundial del Consumidor, para darle ese espacio a los miles y miles de consumidores en el mundo de expresarse y hacer valer sus derechos.
En Panamá, la Autoridad de Protección al Consumidor y Defensa de la Competencia (Acodeco) es la entidad encargada de velar por los derechos y deberes del consumidor panameño.
Estos derechos no solo van destinados a productos, sino a cada uno de los artículos que el consumidor adquiera y pague por ellos, como lo son casa, carro, ropa, alimentos, joyas, línea blanca, todos estos productos de consumo y deben tener garantías y el comerciante explicar al consumidor todo sobre ellos.
BÁSICO
El movimiento de consumidores ha desarrollado su propia visión estableciendo estos derechos básicos.
- A la satisfacción de necesidades: tener acceso a bienes y servicios esenciales, adecuados, alimento, ropa, vivienda, atención de salud, educación, servicios públicos, agua y saneamiento.
- A la seguridad: Ser protegido contra productos, procesos de producción y servicios para la salud o la vida.
- Al ser informado: Acceder a datos necesarios para poder hacer elecciones informadas y ser protegidas contra la publicidad y etiquetados deshonestos o engañosos.
- A elegir: Entre un rango de productos y servicios ofrecidos a precios competitivos con la garantía de seguridad y buena calidad.
- A ser escuchados: Los intereses de los consumidores deben estar representados en la aplicación de su política para el desarrollo.
- A la reparación: Incluyendo la compensación por bienes mal hechos o servicios insatisfactorios.
- A la educación como consumidores
- A un ambiente saludable: Vivir y trabajar en un ambiente que no amenace el bienestar de las generaciones presentes ni futuras.
Por: Herminia Rivera
