Luego del gusto viene el disgusto. La exministra de Trabajo y presidenta interina del partido Cambio Democrático, Alma Cortés, tiene pendiente declarar por el caso de agresión física que fue denunciado en plenos carnavales en San Carlos.
La corregidora del lugar, Elizabeth Martínez, confirmó que ha pasado más de un mes del hecho, pero el proceso continúa. Explicó que la exfuncionaria fue denunciada por supuesta agresión física y amenaza.
'El día 17 de este mes se presentó la abogada de la exministra Alma Cortés y se le hizo la notificación', expresó.
La corregidora espera que esta semana la exfuncionaria se presente junto a su abogada para efectuar la declaración correspondiente.
Martínez explicó que el caso está cumpliendo el debido proceso y apenas se tenga la declaración de las partes se emitirá una resolución. Lo curioso de este caso es que la exministra Cortés, luego de la escena de patio limoso, adujo que ella estaba tomando té frío o ginger ale.
Sin embargo, sus acciones contradecían sus palabras, ya que se le vio gritándole a la asistente del diputado Juan Carlos Arango y hasta rodando por el suelo.
¿Su plata?
'Bájenla de allí que eso lo pagué yo', decía Cortés, cuando pedía que a Samantha Acrich la bajaran de un grillo en medio de los culecos.
Un testigo del pueblo manifestó que Cortés había pagado para ser la abanderada del día, pero no de la noche y eso fue lo que la molestó. Lo curioso es que la mujer que protagonizó el pleque pleque con Cortés es la misma que aparece como parte de la fundación Centro de Innovación y Acción Social (SAIC), que gestionó un apoyo del diputado Juan Carlos Arango por 30 mil dólares.
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Samantha Acrich es copartidaria de Arango en el Partido Popular. Tal vez este caso solo quede en multa o amonestación por parte de la corregiduría, pero deja en evidencia que algunos políticos, aún fuera de la papa, no esconden su prepotencia y malos comportamientos.
