En el corazón de Bushwick, Brooklyn, una comunidad vibrante y diversa, destaca una figura que combina la fuerza de sus raíces panameñas y estadounidenses: Jazlyn, una influencer que ha conquistado las redes sociales con su autenticidad y carisma. Recientemente, Jazlyn tuvo la oportunidad de sentarse cara a cara con uno de los iconos más legendarios del boxeo, Mike Tyson. Durante esta entrevista, Tyson reveló una faceta poco conocida de su vida: la profunda admiración que siente por Roberto “Manos de Piedra” Durán, una leyenda panameña que dejó una marca imborrable en el mundo del boxeo y en el corazón de Tyson.
Mike Tyson, conocido por su agresividad en el ring y su personalidad controvertida, compartió con Jazlyn cómo Roberto Durán moldeó su enfoque hacia el boxeo y su vida. “Durán era malo y feroz, pero popular al mismo tiempo”, explicó Tyson. Esta dualidad de Durán, ser un villano que la gente amaba, resonó profundamente en Tyson, quien se veía reflejado en esa compleja personalidad. “Yo quería ser así. Yo quería ser el villano que todos amaban”, confesó.
Tyson y Durán son dos leyendas del boxeo unidas por su autenticidad y ferocidad.
Tyson no solo admiraba la habilidad de Durán en el ring, sino también su autenticidad fuera de él. “Es un comediante pero una persona muy buena. Él es como yo, dos personas diferentes adentro y fuera del ring”, añadió Tyson, revelando la humanidad detrás de su temible figura pública.
La influencia de Durán en la vida de Tyson no se limitó a su estilo de pelea, sino que también impactó en su filosofía de vida. Tyson encontró en Durán un modelo a seguir, alguien que no solo era imbatible en el ring, sino que también sabía ganarse el respeto y el cariño de la gente, a pesar de su imagen de villano.
Esta entrevista, más que un simple encuentro entre una influencer y una leyenda del boxeo, es un testimonio del poder de la influencia cultural y cómo las leyendas pueden inspirar a generaciones más allá de sus fronteras y épocas. Jazlyn, con sus raíces panameñas, se convirtió en el puente que conectó a Tyson con su admirado Durán, creando un momento de conexión profunda y sincera.
