Un club de fútbol de Corea del Sur enfrenta sanciones, incluida la expulsión de su propio estadio, por colocar muñecas sexuales en asientos vacíos durante un partido el pasado fin de semana.
La K-League es una de las pocas ligas de fútbol que opera durante la pandemia de coronavirus, y los juegos se juegan en estadios vacíos.
Los intentos del FC Seúl de aumentar la atmósfera en el Estadio de la Copa Mundial de Seúl fracasaron a pesar de su victoria por 1-0 sobre Gwangju el domingo. El club expresó su “sincero remordimiento” a medida que la reacción pública se intensificó, pero dijo que un proveedor le aseguró que estaba usando maniquíes, no muñecas sexuales, para imitar a un público local.
Aproximadamente 25 maniquíes fueron suministrados por una compañía local y vestidos con los colores del FC Seúl y con máscaras. La agencia de noticias Yonhap informó que los fanáticos publicaron sospechas sobre las muñecas de tamaño real en las redes sociales durante el partido y una pancarta mostraba los nombres de un fabricante de juguetes para adultos y de modelos que habían inspirado a esas muñecas.
El club FC Seoul, que compite en la K-League de Corea del Sur, recibió una multa de unos 75.000 euros de los organizadores de la liga, por la colocación de muñecas sexuales en las gradas durante un partido a puertas cerradas contra el Gwangju.@SN_deportes #LF pic.twitter.com/xoDUWBLs9v
— locosfut (@locosfut) May 20, 2020
Dicha publicidad infringe las reglas de la competencia, y los funcionarios de la K-League han remitido el asunto a un comité disciplinario.
Si se lo encuentra culpable, el FC Seúl podría recibir una multa de aproximadamente 4 mil dólares o que se le deduzcan puntos. El club también podría ser castigado por dañar el prestigio de la liga en un momento en que había estado disfrutando de una atención internacional sin precedentes.
LOS PRIMEROS EN JUGAR
El 8 de mayo, la K-League se convirtió en la primera gran liga de fútbol en comenzar a jugar después de que la pandemia de coronavirus cerró los deportes en todo el mundo. El juego de apertura atrajo a 19 millones de espectadores en todo el mundo.
Podría haber algo peor para el FC Seúl, el campeón de la liga 2016. Según los informes, la Corporación de Instalaciones de Seúl, que opera el estadio, está investigando una posible violación. Como parte de su contrato de arrendamiento, el club debe obtener un permiso por adelantado para la publicidad. Al no hacerlo, podría ser expulsado del estadio donde se encuentra desde 2004.
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El FC Seúl emitió otra disculpa este miércoles mientras el caso seguía dominando las noticias deportivas. Yonhap dijo que el club le había pedido a la policía que investigara.
“Pedimos disculpas profundamente a todos los preocupados por la desafortunada situación que ocurrió”, dijo el club. “Revisaremos nuestros procedimientos internos para asegurar que esto no vuelva a suceder”.
