A sus 47 años, John Cena enfrentó una noticia devastadora: fue diagnosticado con cáncer de piel tras años de exponerse al sol sin protección. La estrella de la WWE reconoció que nunca usó protector solar y pensó que “el problema nunca lo alcanzaría”.

Su primer signo fue una mancha en el pectoral derecho, la cual fue extirpada sin complicaciones. Un año después, le quitaron otro lunar sospechoso en el hombro derecho. Estas experiencias lo llevaron a cambiar por completo sus hábitos.
Hoy, Cena no solo protege su piel, sino que también educa al público. Se ha dedicado a lanzar una campaña para reforzar la importancia de cuidar la piel ante la radiación UV.
Su testimonio es un llamado de atención, especialmente en una época donde los rayos solares son más intensos. “Usa protector solar, te lo agradecerás en el futuro”, concluyó Cena.