Detrás de cada gran campeón hay una fuerza silenciosa, y este viernes por la noche, cuando Jake Paul y Mike Tyson suban al ring, las verdaderas protagonistas serán Jutta Leerdam y Lakiha Spicer. Estas mujeres no solo han influido en la vida personal de los boxeadores, sino que también han moldeado su éxito dentro y fuera del cuadrilátero. Con estilos de vida completamente diferentes, son pilares fundamentales para sus compañeros.
Leerdam y Paul compartiendo un momento romántico tras una intensa sesión de entrenamiento.
Leerdam, campeona mundial y olímpica en patinaje de velocidad, es una figura pública con millones de seguidores. Su éxito no solo se limita a la pista; su relación con Paul ha sido un catalizador en su carrera como boxeador. “Ella me sacó de un lugar oscuro”, confesó Paul, evidenciando el impacto de su disciplina y enfoque competitivo en su vida.
Spicer y Tyson, una pareja sólida tras 15 años de matrimonio y desafíos superados.
Por otro lado, Spicer, conocida como Kiki, es la fuerza tranquila detrás de Tyson. Su papel en la vida del ex campeón va más allá del apoyo moral. Tras salir de prisión, ayudó a Tyson a vencer sus adicciones y a estabilizar su vida personal. “Sin Kiki, sería un animal salvaje”, admitió Tyson.
Mientras Leerdam refleja glamour y éxito público, Spicer encarna la resiliencia y la fortaleza en privado. Ambas demuestran que detrás de cada campeón hay una historia de amor y apoyo que trasciende el ring. Sin duda, estas mujeres serán protagonistas silenciosas de una noche donde los ojos del mundo estarán puestos en sus parejas.
