Aunque varias de las películas más llamativas de la historia del cine llevaron su sello, las más conocidas premiaciones del cine casi siempre le dieron la espalda. Con clásicos de los años 70 y 80 como la laureda Expreso de Medianoche, Fama, Evita y Mississipi en Llamas, en su palmarés, el cineasta británico Alan Parker era uno de los más conocidos del séptimo arte.
El también director, escritor y actor, llevaba años afectados de una enfermedad que terminó por arrancarle la vida a la edad de 76 años. En 1978 fue candidato al Óscar de la Academia como Mejor Director por su aplaudida Expreso de Medianoche pero no logró llevarse la estatuilla. En 1988 tuvo la oportunidad de optar nuevamente por el galardón gracias a Mississipi en Llamas, pero nuevamente la Academia le dio la espalda.
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En el 2002 la reina Isabel II le dio el título de Caballero del Imperio Británico por su contribución al mundo de las artes y en el 2013 recibió un premio Bafta honorífico, los denominados Óscar británicos como reconocimiento a una gran trayectoria que quedará marcada en la historia del cine.
