Cumplió una condena por un crimen pasional al que apodaron como la cinta ‘Atracción fatal’, ahora tras más de 25 años, es libre nuevamente

Carolyn Warmus, una antigua maestra de Nueva York que fue condenada a 25 años por asesinar a la esposa de su amante en un caso apodado como el crimen de “atracción fatal”, abandonó la cárcel bajo libertad condicional.

Su caso se volvió famoso tras la proyección de la cinta Atracción fatal, en donde la actriz Glenn Close encarna a una mujer con un comportamiento irracional que tiene una gran obsesión por su amante.

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Su libertad estará ceñida a ciertas medidas. Warmus tendrá que cumplir con un toque de queda y conseguir un empleo o participar en un programa vocacional académico, según confirmó el Departamento de Correcciones y Supervisión Comunitaria del Estado de Nueva York.

Warmus ejercía como maestra de secundaria en una escuela del condado Westchester cuando le disparó a Betty Jean Solomon en nueve ocasiones el 15 de enero de 1989 en su casa en Greenburgh, según reportó Daily News.

Warmus mantenía una relación amorosa con Paul Solomon, quien también trabajaba en la escuela. Ella tenía 23 años y él 17 y, según las autoridades, tras cometer el asesinato, Warmus se citó con su amante en el bar de un hotel y bebieron algunos cócteles antes de tener sexo en su automóvil.

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Tras conocerse el crimen, Warmus mantuvo su inocencia, aunque datos ofrecidos por la policía señalan que ella había comenzado a impacientarse cuando, tras cerca de un año y medio de relación, Solomon no había cumplido la promesa de dejar a su esposa y a su hija.

“Ella hubiera hecho cualquier cosa para sacar a Betty Jeanne fuera del juego”, dijo el abogado James McCarty, quien participó en el juicio de Walmus, según publicó CNN.

Walmus fue acusada de asesinato 13 meses después del incidente en un juicio que no concluyó. Luego, en 1992, otra audiencia fue celebrada y finalmente recibió una condena por asesinato en segundo grado.

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En una entrevista previa con CNN, Warmus dijo que había sido “víctima” de un arreglo y quien sufrió los “daños colaterales”.