La empresa Chiquita Panamá anunció este lunes la suspensión definitiva de la producción en una finca completa y áreas adicionales equivalentes a otras dos, debido a los efectos acumulados de la huelga que afecta a las plantaciones bananeras en la provincia de Bocas del Toro.
Según la empresa, esta decisión se tomó tras una primera evaluación técnica que evidenció un nivel de afectación irreversible tanto en áreas de cultivo como en la planta de empaque.
La empresa iniciará los trámites legales y administrativos correspondientes para formalizar el cierre de esas operaciones, aunque continuará monitoreando otras plantaciones para evaluar el nivel de impacto.
Chiquita Panamá advierte que, con el avance de la tercera semana de paralización, la pérdida de fruta y la imposibilidad de recuperación a corto plazo se agravan.
Además, señalaron que los mercados internacionales están reemplazando al banano panameño por productos de otros países, lo que complica aún más la posibilidad de recuperar el espacio en el mercado global.
La empresa reiteró su llamado a los trabajadores a retomar sus labores para evitar que otras fincas lleguen al mismo punto de deterioro y proteger las plazas de empleo que dependen directamente de esta industria en la región.