La empresa Chiquita Panamá lanzó un llamado urgente a sus trabajadores para que retomen las labores en las plantaciones de banano, advirtiendo que el prolongado paro ha generado un daño “irreversible” en la producción y exportación del principal rubro agrícola del país.
Según la compañía, más de 900 mil cajas de banano no han sido exportadas, y las pérdidas económicas superan los 10 millones de dólares. Esta paralización, además de afectar la fruta ya cosechada, compromete las futuras cosechas al deteriorarse las plantaciones.
La situación pone en riesgo no solo a 6,000 empleos directos, sino también a más de 24,000 empleos indirectos que dependen de la industria bananera, considerada el principal motor económico de la provincia de Bocas del Toro.
“Cada día sin cosecha representa una pérdida irrecuperable”, advierte la empresa, recordando que el banano es un producto altamente perecedero que no puede almacenarse o reservarse para otro ciclo.
Chiquita Panamá reiteró su compromiso histórico con Panamá, pero insistió en que el tiempo es un factor clave: mientras más se prolongue la suspensión de labores, más severo será el impacto para la economía local y nacional.