En tiempos donde el costo del arroz se siente hasta en el alma, la agrotienda del Instituto de Mercadeo Agropecuario (IMA) en Penonomé se ha convertido en una verdadera salvación para las familias coclesanas. Ubicada en la sede regional del distrito, esta tienda abre solo de miércoles a viernes, de 7:00 a.m. a 11:00 a.m., pero basta ese espacio de tiempo para que se forme una gran asistencia de compradores.

¿Qué ofrece? Lo básico, pero a precios accesibles: arroz, frijoles, aceite, crema de maíz, atún y sardinas enlatadas. Alimentos esenciales que, en cualquier supermercado, cuestan mucho más. Aquí, el IMA hace su parte con una política clara: que la comida llegue barata a los hogares que más lo necesitan.

La agrotienda de Penonomé es solo una pieza más del engranaje que el IMA está moviendo en todo Panamá. El objetivo: facilitar el acceso a productos alimenticios a precios más accesibles, especialmente en zonas donde el salario apenas alcanza para cubrir lo básico.

Es una iniciativa que ha ganado aplausos y que, en lugares como Penonomé, ya muestra resultados tangibles.
A las afueras de la tienda, hay quienes hacen fila desde antes de las 7:00 a.m. “Aquí ahorro más que en el súper”, dice Rosa, una clienta que cada jueves se lleva lo justo para cocinarle a sus tres hijos. Como ella, decenas aprovechan la venta directa para aliviar la carga de gastos del mes.