Un encuentro breve pero significativo se realizó este martes 10 de junio en el salón Bambito del Hotel El Panamá, donde una comitiva de casi 15 representantes de los sindicatos Sitraibana y Sitrapbi, junto con miembros del Comité Interreligioso, recibieron una carta del presidente José Raúl Mulino. La misiva fue entregada por el arzobispo de Panamá, José Domingo Ulloa, acompañado por el rabino Gustavo Kraselnik, como un gesto de compromiso del gobierno para atender la huelga indefinida que afecta a Bocas del Toro.
El arzobispo Ulloa explicó que la carta refleja la intención del presidente de revisar aspectos legales relacionados con los bananeros, en especial las reformas a la Caja de Seguro Social que han generado descontento en el sector. “Hemos hecho la entrega formal de esta carta en donde el presidente se compromete a revisar ese aspecto de la ley que corresponde a los bananeros”, afirmó.

Ulloa reiteró que la Iglesia está dispuesta a actuar como puente para facilitar el diálogo y la solución pacífica de las diferencias. En sus palabras a los representantes del sector, enfatizó: “no podemos seguir enfrentándonos los panameños”.
Por su parte, el rabino Kraselnik hizo un llamado a la calma y a resolver cualquier conflicto mediante el diálogo.
Tras este acto, los dirigentes sindicales se preparan para reunirse con una junta ampliada de la Asamblea Nacional, donde expondrán las razones de su huelga indefinida, centrada en su rechazo a las reformas que consideran afectan la Ley 45 de 2017.