Quienes también han estado en el frente de batalla y sin bajar la guardia en la lucha contra la covid-19 han sido los paramédicos de las instituciones públicas y privadas.
En Panamá hay unos mil 527 profesionales idóneos en esta rama, que al igual que el resto del personal de salud trababajan más de 12 horas diarias para tratar de salvar la vida a pacientes de la covid-19, pero también de situaciones de violencia que estremecen el país.
Ellos también son humanos y no inmune a este virus, según la Asociación Nacional de Técnicos en Urgencias Médicas (A.N.T.U.M.), unos 80 paramédicos se han contagiado del coronavirus ejerciendo sus labores en estos más de 10 meses de pandemia.
Anaís Victoria García Mckay es una paramédico de la provincia de Panamá Oeste, ninguna de las experiencias que ha tenido en sus 6 años de trabajo la había preparado para lo que está viviendo en esta provincia, la segunda con más contagios de todo Panamá.
García Mckay, tiene 27 años, y contó que cada vez que atiende a pacientes sospechosos o infectados con la covid-19 tiene sentimientos encontrados, porque siempre está el temor de poderse contagiar, pero a la vez alegría, por poder dar un soporte a esa persona necesitada.
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Esta joven paramédico que tiene 3 años de trabajar para el Beremérito Cuerpo de Bomberos de Panamá, dijo que definitivamente sí tiene miedo de contagiar a sus padres, abuelos, primos, a todos mis seres queridos, pero en esta profesión estamos conscientes que somos vulnerables a adquirir cualquier enfermedad, virus o infección, pero aún así salimos todo los días a salvar más vidas.
Dijo la especialista en emergencias médicas que gracias a Dios aún no ha visto morir a nadie dentro de la ambulancia, pero sí en sus hogares o donde nos llamen que esté la persona herida, llámese tienda, calle, acera, banco etc... También, luego de entregar el paciente al hospital vivo, nos enteramos que fallece minutos u horas después.
La verdad siempre perder una vida, será muy duro, porque mi trabajo es salvarla. Pero cuando pasa entiendo que yo hice mi parte y Dios decide el rumbo de la persona.
En Acción. Ambulancia tipo N°3 de soporte vital avanzado de los bomberos.Las edades de los pacientes contagiados por la covid-19 que ha atendido durante estos meses van desde edades pediátricas hasta adultos mayores siendo estos últimos los más comunes dentro de nuestras estadísticas. Pero realmente de todas las edades sin excepción.
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La joven chorrerana nos contó que cuando ella atiende a sus pacientes siempre intenta transmitirle fe y positividad, ya que se condidera una chica positiva, alegre, optimista y de fe.
“No me creerán, pero me encanta hacerlos sonreír y conocer de su vida en esos pocos minutos haciéndolos sentir increíbles por lo que son y hasta donde han llegado. Ya que la salud mental es vital en cualquier dolencia o enfermedad”, expresó, García Mckay.
Para ella, el momento más díficil duarnte esta pandemia ha sido el tiempo de calidad con las personas que ama. Esta pandemia nos ha hecho duplicar, triplicar y hasta cuadruplicar las horas de trabajo, no permitiendo ver a mis familiares, porque estoy más en el trabajo que en la casa. Y me atrevo a mencionar dos más, que para mí siguen siendo muy difícil de asimilar, no poder ayudar a todas las personas que ameriten de una ambulancia porque en verdad ya casi, no nos damos abasto, el tener que decir no, por falta de recurso humano o material e insumos; es una impotencia inexplicable. Y le añado a esto la falta de consciencia aún de muchas personas para con este virus.
Les mandó un mensaje a su colegas: “Sintámonos agradecidos y orgullosos por esta labor que estamos haciendo, donde realmente se ha dado a destacar la importancia del personal de salud, más que cualquier otra profesión, sin desmeritar a nadie, porque no hay nada más humilde y hermoso que dar tu vida por otro, así que sigamos dando la milla extra, aunque estemos agotados, porque no hay momento donde te parezcas más a Jesús, que cuando estás sirviendo”.
Datos
El sueño de Anaís Victoria García Mckay era ser doctora especializada en ginecología, pero por cuestión del destino estudió emergencias médicas.
Los Bomberos de Panamá tiene 107 paramédicos, de los cuales 53 son mujeres.
En el año 2020, los paramédicos de esta institución atendieron 11, 169 emergencias, de las que 7,724 fueron médicas; 2,668 coberturas bomberiles y 777 traslados de paciente con la covid-19.
