La novela “Cuando ya no importa nada” desde su título invita a la lectura. Y ni se diga del total de sus páginas. Te engancha desde el inicio, lo que hace que esta obra literaria aparecida en pandemia de la covid-19 sea no solo sorprendente, sino motivadora.
Su autor, nacido en Veraguas, pero amante de Bocas del Toro, provincia donde lucha por la educación del país y sus estudiantes, sabe combinar sus reflexiones filosóficas y éticas con lecciones prácticas sobre la importancia de los valores en cada una de las etapas o hechos de la vida.
Ese es el plato fuerte de “Cuando ya no importanada nada”, donde la Ética, los valores, la búsqueda de la felicidad y la vida diaria hacen una unidad que se disfruta y te hace reflexionar.
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Una de las características de “Cuando ya no importa nada” es que hace un recorrido por los paradisiacos sitios del Bocas del Toro profundo. Esa tierra de montañas verdes y de aguas transparentes, que hace que cada uno de sus habiantes se sienta orgulloso porque te pone en contacto con Bajo Cedro, Punta Peña, Las Cañas y muchas otras áreas donde la gente vive y lucha por ser feliz, a pesar de las adversidades.
Otro de los manjares de la novela es su invitación a la gastronomía bocatoreña, en la que los frijoles de palo, el dachín y el yaniqueque te invitan a un banquete propio de la gente de la provincia, sin dejar de reflexionar que en Bocas del Toro está viva la desnutrición, que afecta a miles de niños.
Sin duda, la obra nació dentro de los pasillos y aulas del I.P.T. de Chiriquí Grande, por el que el autor siente gran compromiso, pero también en cada uno de los sitios de Bocas del Toro, donde se teje el esfuerzo con la educación, de una juventud que no tiene otra salida que hacer lo correcto y adiestrarse para hacer progresar a sus familias.
“En la vida cuando se es feliz no hay necesidad alguna, cuando hay tristeza hay necesidad hasta de morir”, sentencia el autor en sus páginas finales y con ello hace recordar el libro “Ana Karenina”, de León Tolstoi, quien señala: “Todas las familias felices se parecen unas a otras, pero cada familia infeliz lo es a su manera”.
Datos:
El profesor ya prepara su segundo libro.
Amado Ábrego es profesor de educación
media de Ética y Filosofía.
Egresado de la Universidad de Panamá.
Enseña el deber ser, apegado a la Ética
para lograr la felicidad y metas en la vida.
