Dos homicidios con arma de fuego se registraron la noche del pasado domingo en la provincia de Colón. Ambos hechos de sangre ocurrieron en comunidades del distrito de Colón, en Vista Mar de Puerto Pilón y Residencial Irving Saladino, en Sabanitas.
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Alejandro Alexis Gallardo, alias “Fulo”, de 23 años de edad, murió en la sala de operaciones del Hospital Amador Guerrero tras recibir 12 impactos de arma de fuego.
El infortunado se encontraba cerca de las 5 de la tarde en la comunidad de Vista del Mar en el corregimiento de Puerto Pilón, cuando sujetos a bordo de un taxi con la placa tapada se bajaron y le hicieron las detonaciones sin contemplación.
El joven mal herido fue auxiliado por conocidos que a bordo de un automóvil lo llevaron a buscar atención médica en el cuarto de urgencias de la policlínica Don Laurencio Jaén en Sabanitas, donde fue estabilizado y trasladado en ambulancia al hospital Manuel Amador Guerrero.
En tanto, en el salón de operaciones los médicos intentaron salvarle la vida, pero fue imposible porque no resistió a las heridas de bala recibidas.
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Se desconoce el móvil del crimen y la Policía Nacional realizó operativos para la captura de los homicidas y el Ministerio Público
Mientras Luis Antonio “Papito” Del Cid Ortiz de 18 años de edad, quedó tendido en la acera frente a la multifamiliar en el residencial Irving Saladino, donde residía, al recibir varios tiros.
Eran aproximadamente las 9:50 p.m. de la noche del pasado domingo cuando se escucharon varias detonaciones y luego se observo el cuerpo Del Cid Ortíz tendido en la acera frente a la multifamiliar 25 donde vivía.
Se pudo conocer que él estaba en su apartamento pero alguien lo llamo a su celular y el bajó a la planta baja del edificio. Según testigos un sujeto salió de uno de los callejones y le efectúo varias detonaciones en la cabeza muriendo instantáneamente.
La muerte de “papito” como era conocido según las primeras investigaciones se vincula al control del territorio de individuos que han salido recién de la cárcel y viven en esa área.
Sus familiares indicaron que estaban molestos porque hay un cuartel de la Policía Nacional cerca y no hacen rondas para controlar las personas que están fuera de sus casas sin importarte el toque de queda a la 7:00 p.m. por la pandemia del coronavirus. Por lo que los delincuentes aprovechan para cometer su fechoría.
Por ambos casos no hay aprehendidos. A la fecha suman 48 homicidios en Colón.
