La madrugada del lunes se tiñó de sangre en el bar El Mirador, ubicado en el sector Génesis del corregimiento de Las Mañanitas, donde Prudencio Vidal Murillo, de 42 años, conocido como “Jhonis”, fue asesinado de un balazo en pleno local.
El hecho ocurrió alrededor de las 2:30 de la madrugada, mientras el bullicio de los clientes cubría el ambiente de la madrugada. Nadie se percató del disparo. El suceso pasó desapercibido hasta que el bar cerró y, al encender las luces, algunos clientes notaron que “Jhonis” tenía un impacto de bala en el lado izquierdo del tórax.
Mientras unos intentaban sacarlo del lugar, otros corrieron a alertar al encargado del establecimiento. Presuntamente, sujetos no identificados le dispararon a quemarropa y huyeron del lugar como si nada hubiese pasado.
“Jhonis” fue trasladado de urgencia al Hospital Irma Lourdes Tzanetatos en Tocumen, pero a pesar de los esfuerzos médicos, fue declarado muerto a las 3:15 de la madrugada. Según los reportes, la víctima llegó en estado crítico, con lesiones internas que no resistió.
Lo más insólito es que la noticia no se conoció hasta el martes, ya que la muerte se confirmó oficialmente en el hospital, fuera del lugar de los hechos.
Sobre “Jhonis” se sabe que no era un desconocido para las autoridades. En 2006 fue fichado como integrante de la pandilla “MOM”. Un año después, en 2007, fue detenido por homicidio y recluido en el penal de La Joyita. Además, estuvo vinculado a allanamientos en su residencia por casos de investigación, aunque nunca se le halló evidencia ilícita.
Las autoridades ahora investigan este crimen que, hasta el momento, no tiene responsables identificados, mientras en la comunidad de Las Mañanitas resuena el eco de un disparo que pasó desapercibido… hasta que fue demasiado tarde.



