El nuevo coronavirus puede infectar a cualquier persona, pero son los adultos mayores quienes tienen más probabilidad de enfermarse gravemente, debido a que el sistema inmunitario se debilita con la edad.
El quedarse en casa para no exponerse al virus puede llevar a los adultos mayores al sedentarismo, un fenómeno que ocurre cuando se va perdiendo poco a poco la movilidad y el cual es uno de los principales causantes de enfermedades, especialmente cardiacas.
El sedentarismo no solo refuerza el envejecimiento, sino que causa el deterioro físico y mental de las personas mayores, ya que con el paso de los años se va perdiendo cierta fuerza y agilidad.
Los reflejos ya no son los mismos y eso hace que los adultos mayores comiencen a tener ciertas limitaciones en el movimiento. Puede que sus habilidades motoras ya no sean iguales y que comiencen a caerse o que tengan dolores debido a enfermedades limitantes.
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David Garrido, fisioterapeuta creador del grupo SEFIG, con más de 10 años de experiencia, manifestó que el sedentarismo tiene repercusiones negativas y más sumado a la ansiedad que ha generado la pandemia por el covid-19.
“El sedentarismo puede traer problemas de salud de tipo vascular, tensión arterial, problemas articulares, dolencias musculares y dificultad en la movilidad”, expresó.
Garrido indicó que el mantenerse activo y hacer ejercicio ayuda al control de la hipertensión y de los niveles de glucemia a nivel de metabolismo y mejora, sobre todo, los factores emocionales y psicológicos.
“Los ejercicios siempre van a traer un beneficio, aunque sea solamente la movilidad del cuerpo, lo principal sería que los ejercicios que se hiciesen en casa sean los correctos, por eso recomiendo los ejercicios guiados, los cuales pueden ser muy variables dependiendo de la condición que tenga cada adulto mayor”, aseveró.
Señaló que con la “nueva normalidad”, muchas personas han optado por recurrir a YouTube y buscar tutoriales y de cierta manera “automedicarse” haciendo ejercicios que piensan que son los correctos, pero que en muchos casos terminan causándose una lesión o agravando la condición ya existente.
“Ninguna guía de ejercicio nunca reemplazaría el contacto físico con un fisioterapeuta”, afirmó.
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El profesional de la salud recomienda a aquellos abuelitos que deciden quedarse en casa y mantenerse activos, no comprar costosos equipos, utilizar simples objetos de uso cotidiano, como pueden ser un guante de látex, un aerosol desinfectante o algún producto enlatado que con la guía correcta podrá ayudarlos a mantener el cuerpo en movimiento.
Beneficios
Que un fisioterapeuta te puede dar:
Valoración funcional.
Tratamiento adecuado y personalizado.
Recuperación de algunas funciones motoras.
Relajación y adaptación.