La inhalación y exposición de vapor de mercurio puede producir efectos perjudiciales para el ser humano e, incluso, de recibir grandes cantidades podría causar la muerte. El mercurio está catalogado por la Organización Mundial de la Salud (OMS) como uno de los 10 productos más tóxicos del planeta.
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Panamá ratificó hoy su participación en la Convención de Minamata, el primer acuerdo ambiental internacional que regulará el uso de mercurio en actividades humanas. Con su ingreso ya serían más de 50 los países que han ratificado la Convención, que entra en vigor el próximo 16 de agosto. Este convenio fue firmado el 10 de octubre del 2013 y fue ratificado el 29 de septiembre del 2015, que busca eliminar progresivamente el uso y las emisiones de mercurio para el año 2025.
El mercurio es un contaminante global que afecta la salud humana y la de los ecosistemas. Existen numerosas fuentes de emisiones de mercurio al ambiente, entre las que se encuentran el sector comercial y empresarial a través de la inadecuada gestión de los tubos y bombillos fluorescentes, al igual que las lámparas de alta intensidad utilizadas en la iluminación pública, que contienen este metal.
La primera reunión de la Conferencia de las Partes del Convenio de Minamata sobre el mercurio se realizará del 24 al 29 de septiembre del 2017 en Ginebra, Suiza, y culminará con un evento de alto nivel denominado 'Digamosle adiós al mercurio', dijo Jorge Conte, cofundador de la Alianza Contaminacion Cero.
Conte explicó que la actividad que se realizó el día de hoy en el salón Oropéndolas del Parque Natural Metropolitano, llamada 'Emisiones de Mercurio en Panamá', es para reafirmar el compromiso que Panamá adquirió al momento de ratificar el convenio de Minamata en el año 2015, donde ya Panamá está en cuenta regresiva. En esta actividad participaron empresas privadas y de las diferentes universidades de Panamá.
Agregó que en nuestro país existen dos tipos de mediciones, las legales y las ilegales, donde se calcula que en Panamá se emiten 50 toneladas de mercurio anualmente, principalmente por los desechos como las lámparas fluorescentes, equipos médicos, entre otros.
Rina Barba, colaboradora de la Alianza, destacó: 'Nosotros en la Alianza estamos contentos de formar parte de este gran avance y tener aliados en esta lucha contra la contaminación. Es por esto que queremos agradecer también a los muchos colaboradores que han visto, al igual que nosotros, que el cambio empieza desde dentro, de la casa'.
Por: Jairo Cornejo
Foto: Miguel Cavalli
