Fidel Escobar Mendieta ha sido una figura indispensable en la escena futbolística de Panamá y Centroamérica, destacándose como un defensor central de calibre internacional.
Desde sus inicios en Panamá hasta su éxito en Costa Rica y su participación en competencias globales, la carrera de Escobar ha sido un testimonio de su habilidad, disciplina y liderazgo en el campo.
Nacido el 9 de enero de 1995 en Ciudad de Panamá, Fidel comenzó su carrera en el San Francisco de La Chorrera. Con sus primeros pasos se hizo de conocimiento que Fidel es sobrino de uno de los máximos exponentes del fútbol panameño: Víctor René Mendieta.
Se destacó por su inteligencia táctica, conducción de balón y efectividad en los pases lo que le llevó a debutar profesionalmente a una temprana edad. En el San Francisco FC, jugó 16 partidos, mostrando cualidades de un defensor prometedor. Disputó la final del Clausura 2013 de la LPF y la perdió contra el Sporting San Miguelito, siguiendo club en su carrera.
Fidel Escobar se trasladó al Sporting San Miguelito, donde su desarrollo continuó con paso firme. Durante su tiempo en este club, disputó aproximadamente 65 partidos, y su rendimiento sólido en la defensa fue crucial para su reconocimiento en el fútbol panameño. Su habilidad para cortar jugadas y iniciar ataques desde la defensa lo convirtió en un jugador a seguir.
La habilidad de Escobar para competir a nivel internacional quedó demostrada en su participación en el Campeonato de Concacaf y el Mundial Sub-20 de la FIFA, ambos en el año 2015.
Esta experiencia fue crucial, ya que le permitió medirse contra jóvenes promesas de todo el mundo, mejorando su juego y preparándose para desafíos mayores. En el torneo, Fidel jugó un papel clave en la defensa, ayudando a Panamá a competir dignamente en un escenario mundial.
A la temporada siguiente, mediados del 2016, se hizo oficial su traspaso al Sporting Club de Portugal. Jugaría en el equipo filial en la Segunda Liga con el claro objetivo de saltar al primer equipo. Los 8 primeros partidos eran un indicio de que la carrera de Escobar iba con buen norte.
Sin embargo, Fidel cayó en el atrevimiento de no reportarse tras las navidades. Fue de conocimiento público que el club luso tuvo la intención de abrir un proceso ante la FIFA por el incumplimiento del contrato.
El asunto se solventó y Escobar volvió a jugar unos cuantos partidos más antes de marcharse al New York Red Bulls II, donde compartiría camerino con Michael Amir Murillo.
En 2015, Fidel dio el salto a Estados Unidos al unirse a los New York Red Bulls. Escobar participó en más de 50 partidos, donde su adaptabilidad y consistencia defensiva fueron altamente valoradas. Su periodo en Estados Unidos fue fundamental para su desarrollo, enfrentando un estilo de juego rápido y físico que pulió aún más su técnica y visión de juego.
En busca de nuevos retos, Escobar se trasladó a Europa en 2019 para unirse al Córdoba CF, Alcorcón y Cultural Leonesa en España. Tras 58 partidos en solo tres años, Fidel fue fichado por el Deportivo Saprissa, donde su carrera se llenó de triunfos colectivos.
Cuatro títulos en dos años, siendo figura y líder de la zaga morada. Ha disputado 87 partidos, en los que incluso ha jugado como mediocampista, cuestión que demuestra su capacidad y visión de juego.
A nivel internacional, Escobar ha sido un pilar para la selección de Panamá. Hasta la fecha, ha acumulado más de 80 partidos con la selección mayor, participando en torneos significativos como la Copa Oro de la CONCACAF y la Copa del Mundo FIFA 2018 en Rusia, donde su experiencia y solidez defensiva fueron fundamentales para el equipo. Considerado el heredero de figuras emblemáticas como Felipe Baloy y Román Torres, Fidel ha absorbido valiosos conocimientos y experiencias de estos veteranos, fortaleciendo su liderazgo y presencia en el campo.
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