En un encuentro bilateral celebrado en la ciudad de Sevilla, el presidente de Panamá, José Raúl Mulino, y su homólogo español, Pedro Sánchez, sostuvieron una reunión clave que pone al país centroamericano en el radar de inversión europea. En el centro de la conversación: el ambicioso proyecto ferroviario Panamá-David-Frontera, valorado en aproximadamente 500 millones de balboas.
Durante la reunión, Sánchez manifestó el interés de empresas españolas en participar en el desarrollo del tren, destacando la experiencia de España como uno de los países con mayor desarrollo en líneas ferroviarias a nivel global. Mulino, por su parte, adelantó que la licitación para el primer tramo del tren se abrirá en el primer trimestre de 2026.
El diálogo también giró en torno a temas estratégicos como el Canal de Panamá y su sistema portuario, que Sánchez consideró fundamentales para el comercio global. Mulino recalcó que el país continúa optimizando su posición logística, y confirmó que varias navieras han mostrado interés en nuevas inversiones portuarias.
Uno de los aspectos más relevantes fue el respaldo expresado por España hacia la salida de Panamá de listas discriminatorias de la Unión Europea. Sánchez reconoció los avances del país en materia financiera y regulatoria, lo que refuerza su potencial como destino seguro para la inversión.
En el plano de la cooperación, se acordó fortalecer los lazos económicos y financieros, además de explorar nuevas áreas de colaboración como energías renovables y turismo ecológico. También se valoró positivamente el régimen panameño de empresas multinacionales, bajo el cual operan firmas como Telefónica, Mapfre y Grupo AJE.
Este encuentro sienta las bases para una nueva etapa de colaboración estratégica entre ambos países, con la cumbre CELAC-UE en el horizonte como plataforma para consolidar la integración entre América Latina y Europa.