Con fiesta, alegría, licor y fuegos artificiales fue despedida Adelith Itzel Samaniego, de 36 años, quien murió de un disparo el pasado viernes en la ciudad de Panamá.
En Macaracas, a su llegada la noche del lunes, hubo un despliegue de fuegos artificiales, y ayer en el funeral se rompieron todo tipo de medidas sanitarias: algunos sin mascarillas, sin distanciamiento y sin ninguna autoridad sanitaria ni de seguridad que lo impidiera.
En la comunidad se comentó que ella era una persona muy alegre, muy querida y era buscada siempre como abanderada, como ocurrió el año pasado en la Semana del Campesino en Chupá de Macaracas.
También fue abanderada de exreinas de fiesta de Reyes en Macaracas y apoyaba a equipos de fútbol, béisbol y organizaba fiestas de Navidad en pueblos apartados del distrito.
LEA TAMBIÉN: Encuentran un cadáver. Flotaba a orillas de un río
Adelith tenía residencia en calle Bella Vista de Macaracas, pero desde hace algunos años emigró a la ciudad capital.
Sus familiares pidieron no especular e indicaron que ese disparo no era para ella.
Datos
El hecho de sangre ocurrió la noche del viernes afuera del local Buko Market, en Bella Vista, ciudad capital.
Los homicidas hicieron más de 20 detonaciones.
Junto con Adelith murió un extranjero gerente del local.
(Por: Zenaida Vásquez)
