Van 67 días sin clases en las escuelas públicas y la cosa no pinta bien. El conflicto entre los gremios docentes, el Meduca y el Gobierno arrecia, con amenazas de reemplazos, sueldos retenidos y cero intención de ceder por parte del presidente Mulino. Mientras tanto, los estudiantes siguen esperando.
Desde el 23 de abril, miles de profesores han abandonado las aulas como protesta contra la Ley 462, que cambia las reglas del juego en las jubilaciones especiales. Ya son más de dos meses sin clases en el sistema oficial, y los gremios magisteriales insisten en mantenerse en pie de lucha.
Este sábado 28 de junio, los líderes docentes lanzaron un llamado urgente a sus colegas y al pueblo panameño: necesitan ayuda económica, moral y legal, ya que unos 7,500 educadores no están cobrando quincena por orden de la Contraloría.
La situación escaló cuando el Meduca activó el Decreto Ejecutivo 17, que permite contratar reemplazos para salvar el segundo trimestre escolar. Pero los sindicatos no se quedaron callados. Humberto Montero, uno de los voceros del Frente Nacional de Educadores Independientes, lo tildó de “ilegal” y advirtió que ese movimiento solo agita más la olla.
En respuesta, el Ministerio recibió a miles de aspirantes dispuestos a ocupar los salones vacíos. Lucy Molinar, ministra de Educación, pidió disculpas por fallos en el sistema de licencias y defendió la medida: “No podemos seguir castigando a los estudiantes”.
Por su parte, el presidente Mulino fue contundente: “No voy a refrendar ningún cambio a la Ley 462. Hagan lo que hagan en la Asamblea, no la sancionaré”.