El gobierno arrancó con cambios fuertes. Bajo el lema “hacer más con menos”, el presidente José Raúl Mulino puso en marcha una reestructuración estatal que ya dejó sus primeras bajas: el Ministerio de la Mujer desaparece, ProPanamá cambia de casa y dos bancos estatales serán transformados en institutos con menos personal y menos gastos.
El Ministerio de la Mujer, creado en diciembre de 2021 durante la administración de Laurentino Cortizo, dejará de existir como entidad independiente. A partir de ahora funcionará como una secretaría dentro del Ministerio de Desarrollo Social (MIDES). Esta institución nació tras la transformación del antiguo Inamu, con el objetivo de formular políticas de género, atender casos de violencia contra la mujer y promover la igualdad. Sus funciones seguirán, pero con una estructura más pequeña y menos presupuesto.
Otro de los movimientos anunciados fue la salida de ProPanamá del organigrama actual. La agencia, encargada de atraer inversiones y promover la marca país, pasará a ser parte del Ministerio de Comercio e Industrias (MICI). Las tareas de promoción internacional y coordinación de imagen país estarán a cargo de una mesa interinstitucional “ad honorem”, que incluye al MICI, el Ministerio de Economía y Finanzas (MEF), la Cancillería, Promtur, la Secretaría de Asuntos Económicos de la Presidencia y representantes del sector privado.
En el área financiera también hubo sacudida. El Banco Hipotecario Nacional (BHN) será convertido en un Instituto de Fomento a Viviendas de Interés Social, bajo la coordinación de la Caja de Ahorros. Según el anuncio, se recortará el 80% de la planilla actual y se eliminarán pagos por alquileres. El proceso incluirá una etapa de titulación de viviendas, dando prioridad a los propietarios que están al día con sus pagos.
Por su parte, el Banco de Desarrollo Agropecuario (BDA) también será transformado. Pasará a ser un Instituto de Fomento Agropecuario, con reducción de estructura y costos operativos. La supervisión quedará en manos del Banco Nacional de Panamá.
Mulino aseguró que estos cambios buscan acabar con la duplicidad de funciones, recortar gastos innecesarios y concentrar esfuerzos en lo esencial. “Vamos a hacer más con menos”, repitió el presidente al justificar los recortes.
Aunque no se anunciaron despidos masivos en otras entidades, desde el Ejecutivo no descartan más ajustes en el resto del año. Lo cierto es que el gobierno ya empezó a mover fichas y varios sectores están atentos a lo que viene.