¿Y si la figura del “bien cuida’o” se vuelve legal y con salario incluido? Esa fue la inesperada propuesta del político y presentador Franklin Robinson durante una reciente entrevista, en la que soltó una idea que dejó a muchos con la boca abierta y las redes encendidas.
Robinson aseguró que, si él fuera alcalde, implementaría un sistema para cobrar por el uso de los estacionamientos públicos y, con ese dinero, pagarle un salario a los bien cuida’os —esos personajes populares que se dedican a “vigilar” los autos a cambio de una propina no siempre voluntaria.
“Les pagaría por estar ahí, mirando nuestros carros, y así evitamos que otros bien cuida’os los rayen o los dañen”, explicó Robinson, haciendo alusión a uno de los grandes temores de los conductores: dejar su vehículo sin vigilancia y terminar con un rayón misterioso si no colaboran con el “cuida’o” de turno.
La propuesta, aunque planteada de forma informal, plantea una legalización y formalización de una práctica callejera que ha generado debate por años. Muchos ciudadanos sienten que están siendo obligados a pagar por un “servicio” que no solicitaron, mientras que otros reconocen que, en algunos sectores, estos “bien cuida’os” sí representan cierta disuasión para los delincuentes.
Robinson lanzó la idea directamente al alcalde capitalino Mayer Mizrachi, quien aún no ha reaccionado públicamente, pero cuyo estilo disruptivo y tech-friendly ha hecho que más de uno se pregunte si el planteamiento podría escalar.
Por ahora, no hay ningún proyecto oficial en curso, pero la propuesta ya provocó reacciones divididas en redes: entre los que la ven como una solución práctica y los que la califican como “extorsión legalizada”.
Lo cierto es que los bien cuida’os están más cerca que nunca de pasar de la esquina a la planilla municipal.