El Gobierno Nacional informó avances en la atención de la crisis de agua potable que afecta a la región de Azuero, tras detectarse altos niveles de contaminación en la cuenca del río La Villa, fuente principal de abastecimiento para miles de personas en las provincias de Herrera y Los Santos.
En una conferencia ofrecida desde el Anfiteatro del Palacio de las Garzas, el ministro de Ambiente Juan Carlos Navarro y el director del IDAAN, Rutilio Villarreal, presentaron un informe técnico sobre la situación actual, las acciones inmediatas y las medidas a mediano plazo que buscan una solución definitiva a décadas de anarquía ambiental.
“El gobierno del presidente José Raúl Mulino trabaja para dar una solución definitiva a esta crisis, con medidas enérgicas que pondrán fin a años de corrupción y negligencia ambiental”, afirmó Navarro, quien pidió a la ciudadanía mayor conciencia y compromiso con la protección de las fuentes hídricas.
Según el informe interinstitucional elaborado por MiAmbiente, IDAAN y el MINSA, se identificaron 36 puntos críticos en la cuenca, de los cuales 23 presentan niveles severos de contaminación. Entre las principales causas se destacan el vertimiento ilegal de agroquímicos y lixiviados, deforestación, extracción ilegal de agua, mal manejo de aguas servidas y actividades agropecuarias no reguladas.
De estos puntos:
16 incumplen normativas ambientales,
8 están en adecuación y han sido cerrados temporalmente,
7 son de pequeños productores que ya realizan mejoras,
1 fue clausurado voluntariamente de forma definitiva.
Navarro anunció que se aplicarán sanciones de hasta B/.10,000 a los responsables, y que se remitirán expedientes al Ministerio Público para que investigue los posibles delitos ambientales.
Por su parte, el director del IDAAN, Rutilio Villarreal, confirmó que las plantas potabilizadoras Roberto Reyna, Rufina Alfaro, Llano de Piedra y Macaracas ya operan al 100% tras una limpieza exhaustiva, pero el agua que circula en las redes aún no es segura para el consumo humano, ya que los parámetros microbiológicos están fuera de norma, a pesar de cumplir los estándares químicos y físicos de COPANIT.
“La única agua apta para el consumo es la que se entrega mediante camiones cisterna como parte del operativo especial de distribución”, recalcó Villarreal.
El monitoreo en la zona continuará de forma constante, y las autoridades señalaron que la solución integral dependerá del cumplimiento riguroso de las normas ambientales por parte de productores, empresas y comunidades.