A cuatro semanas de protestas y paros contra la Ley 462, que reforma la Caja de Seguro Social (CSS), Guillermo Cortés, representante del Grupo Mundos de Jubilados, lanzó un mensaje claro: es hora de reflexionar y dejar atrás la violencia.
Cortés expresó su preocupación por los actos vandálicos que han ocurrido, como el saqueo de escuelas en Bocas del Toro, y aclaró que su opinión no representa a todos los jubilados y pensionados. “No se trata solo de la Ley 462, ni del embalse del río Indio o la mina. Esto ya es un juego de fuerzas con José Raúl Mulino”, afirmó, señalando que las motivaciones de las protestas han ido más allá del tema original.
Aunque reconoció que la ley orgánica del Seguro Social necesita cambios —por una junta directiva que no funciona bien y la existencia de muchos sindicatos internos— lamentó el impacto negativo que los paros han tenido en la educación. “Mi nieto está en kínder y lleva tres semanas sin clases. ¿Qué va a aprender para el primer grado?”, cuestionó.
Además, Cortés desmintió algunas afirmaciones que circulan entre los manifestantes, como que las viudas perderán derechos o que ya no se pueden inscribir beneficiarios. “Eso es mentira”, aseguró.
El representante de los jubilados también advirtió que las protestas podrían estar buscando desestabilizar el país, comparando la situación con regímenes de otros países latinoamericanos. “El verdadero pueblo está en la calle trabajando para llevar el pan a la familia, no estos que quieren usar el país para sus ansias de poder”, dijo.
Por último, recordó que hay deudas pendientes con los jubilados, como el proyecto para la Ley 6 sobre descuentos y la solicitud para crear un Consejo Nacional que ajuste las pensiones. “El ministro de la Presidencia puede crear ese consejo y no le quitaremos más de 20 minutos”, insistió.
Aunque defendió el derecho a protestar, Cortés pidió que se abra un espacio para el diálogo y la búsqueda de soluciones reales. “Nosotros no solo hablamos, presentamos fórmulas para resolver, pero las autoridades deben actuar”, concluyó.