Tierra para los que la trabajan: 230 familias reciben títulos en la Cuenca del Canal

Lo que para muchos parecía un sueño imposible, finalmente se convirtió en realidad. Un total de 230 familias de la Cuenca Hidrográfica del Canal de Panamá recibieron sus títulos de propiedad, garantizando así el derecho legal sobre las tierras que han trabajado por generaciones.

El acto de entrega se realizó en el poblado de Cuipo, Colón, con la presencia de autoridades del Canal de Panamá, la Autoridad Nacional de Tierras (ANATI) y el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD). Los beneficiarios provienen de comunidades de los corregimientos de Ciricito (Colón) y La Encantada (Chagres), marcando un paso clave hacia la estabilidad y el desarrollo de estas familias.

Propiedad, progreso y sostenibilidad

Desde 2006, el Programa de Catastro y Titulación de Tierras ha otorgado más de 23.000 títulos en la Cuenca del Canal, asegurando a los moradores seguridad jurídica y acceso a programas de incentivo económico y ambiental. “Este título significa tranquilidad para mi familia y una herencia para mis hijos”, expresó emocionada María Gladys Ruíz Rodríguez, una de las beneficiarias.

Los títulos entregados también facilitarán el acceso a créditos y mejoras en infraestructura, transformando la vida de más de 1,150 personas que, por décadas, han enfrentado la incertidumbre de no ser legalmente dueños de sus tierras.

El administrador del Canal de Panamá, Ricaurte Vásquez Morales, destacó la importancia de esta entrega, subrayando que “es un reconocimiento a quienes han trabajado estas tierras por generaciones, asegurando su derecho y su futuro”.

Por su parte, el administrador de ANATI, Andrés Pagés Chanis, resaltó que este programa “abre oportunidades para mejorar la calidad de vida de las familias y fortalecer la economía local”.

Esta titulación representa más que un pedazo de papel: es la puerta hacia el desarrollo, permitiendo a las familias invertir con confianza en sus tierras y acceder a beneficios que antes les eran negados. Un paso histórico para la Cuenca del Canal y un triunfo para quienes nunca dejaron de luchar por lo que les pertenece.